Hoy sábado 21 de diciembre a las 10 h y 21 min, hora oficial peninsular y balear, Ceuta y Melilla, una menos en Canarias, finalizará el otoño y dará comienzo el invierno patrio. Esos son al menos los cálculos, y a ellos me ciño, del Observatorio Astronómico Nacional, dependiente del Instituto Geográfico Nacional que pertenece al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
Unos
organismos que nos dicen también que dicha estación, la única interanual y más
corta de las cuatro, durará 88 días y 23 horas terminando el 20 de marzo de
2025 con el comienzo de la primavera; es una circunstancia física de
naturaleza temporal que tienen todas las estaciones en común: la de durar,
exactamente, lo que tarda en llegar la siguiente y así es.
Tras
el otoño llega el invierno, después la primavera seguida del verano, y vuelta a
empezar. Pero no es ésta la única circunstancia física que comparten las
estaciones, existe otra, de naturaleza espacial, la de su origen, que
abordaremos a continuación.
Una cuestión de convenio
Es lo que en realidad resulta ser el inicio astronómico de las estaciones en general, ya que lo tenemos consensuado como el instante en el que la Tierra pasa por una determinada posición de su órbita alrededor del Sol.
En
el caso de diciembre esta posición se da en el punto de la eclíptica en
el que nuestra estrella alcanza su posición más austral, cuando tiene la máxima
declinación sur (-23º 27').
El
día en que esto sucede el Sol alcanza su menor elevación sobre el
horizonte al mediodía y describe en el cielo el arco más corto, dando como
resultado el día con menos horas solares del año, además de apenas cambiar su
mayor altura al mediodía durante varios días.
Un sol que parece estático, motivo por el que a esta circunstancia espacial se la conozca como solsticio de invierno (etimológicamente, del latín solstitium “Sol quieto”). Lo parece tan solo porque, según van avanzando los días después de esta fecha, el de mediodía aparece cada día un poquito más hacia el norte y un poquito más alto si lo miramos desde el hemisferio norte.
Y
de invierno el solsticio, le decía, porque escribo estas líneas en el
hemisferio norte (... Y Sevilla) pero no debemos olvidar que en el
hemisferio sur lo que tiene lugar es el solsticio de verano, cuando arranca el
estío.
De
ahí que sea menos equívoco el uso de las expresiones solsticio de diciembre
y solsticio de junio, y que cada uno le adjudique la estación
astronómica y meteorológica correspondiente.
Posibles fechas de inicio
Desde el punto de vista calendario el inicio de nuestro invierno puede darse, a lo sumo, en cuatro fechas distintas que van del 20 al 23 de diciembre, ambas inclusive.
A
lo largo de este siglo XXI el invierno se iniciará sólo entre los días 20 y 22
de diciembre, referido a la fecha oficial española, siendo su inicio más
tempranero el del año 2096 (a saber, quién andará por aquí) y el más tardío el
ya pasado del 2003.
Es
sabido que estas variaciones de un año a otro son motivadas por el modo en el
que se encajan, de un lado, la secuencia de años según el calendario, unos son bisiestos
y otros no, y del otro, la duración de cada órbita de la Tierra
alrededor del Sol, un periodo de tiempo conocido como año trópico.
(Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
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