RCR y música: 'Macarena' y medicina

En lo que concierne a la parte musical del asunto, poco que decir que usted no sepa ya -y probablemente mejor que un servidor- acerca del dúo español Los del Río y su extraordinario éxito internacional.

Me refiero, claro, al que tuvieron entre 1994 y 1996 con la canción Macarena, perteneciente a su álbum A mí me gusta (1993). Una canción sin embargo que, y a poco que se escarbe, tiene una intrahistoria por contar si bien tendrá que ser en otro momento.

Por ahora nos quedamos con su letra: Dale a tu cuerpo alegría Macarena  /  que tu cuerpo es pa' darle alegría y cosa buena  /  dale a tu cuerpo alegría Macarena  /  eeeh Macarena.... aaahe! A qué dudarlo, un texto emblemático donde los haya, dentro de la música popular de la década de los 90.

Y sobre todo nos quedamos con su ritmo, del que sí se puede apuntar algo desde el punto de vista médico, pues resulta que al ser de unas cien pulsaciones al minuto (100 min^-1), sirve de ayuda a la hora de aplicar las compresiones en una reanimación cardiopulmonar (RCP).

O así parece mostrarlo un reciente estudio realizado por un equipo de médicos e investigadores de la UB y la UAB, y presentado este pasado verano en el Congreso Euroanaesthesia que se celebró en Copenhague (Dinamarca).

Investigación “macarena” sobre el RCR

El estudio se realizó con una muestra de ciento sesenta y cuatro (164) estudiantes de medicina de la UB, que practicaron compresiones torácicas en un maniquí durante dos minutos (2 min), divididos en tres grupos. Uno, que llamaremos A, que llevó a cabo la RCP sin guía alguna; otro (B), que lo hizo siguiendo el ritmo de la canción Macarena; y el último (C), escuchando un metrónomo online.

Naturalmente, y como paso previo, se comprobó que los participantes conocían a la perfección la canción, y que podían seguir mentalmente su ritmo para hacer las compresiones torácicas de la RCP. Y con todo preparado, se llevó a cabo el experimento.

De los resultados obtenidos concluyeron que el porcentaje de compresiones adecuadas, entre los 100 y los 120 pulsos por minuto, era significativamente más alto en los grupos C y B, que usaban el metrónomo y la canción, en comparación con el del A, sin referente temporal.

Cuantitativamente, los que practicaron las maniobras de resucitación sin guía alguna (grupo A), sólo alcanzaron el veinticuatro por ciento (24%) de las compresiones adecuadas. Mientras que los que lo hicieron al ritmo de Macarena, grupo B, llegaron al setenta y cuatro por ciento (74%). Y los que apretaron siguiendo el compás del metrónomo, grupo C, llegaron al noventaiuno por ciento (91%) de optimización de la RCP. O sea. (Continuará)

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