(Continuación) Todas las combinaciones (6) menos las incompatibles, húmedo-seco y caliente-frio, por lo que se nos quedan en cuatro (4). Unos atributos que a su parecer aristotélico la materia no presentaba per se, no eran inherentes a su naturaleza pero, se les podían infundir.
Elementos:
cualidades
Así es como pensó que se
formaría el 'agua', a la vez húmeda y fría; la 'tierra', fría y seca;
el 'fuego', seco y caliente; el 'aire', caliente y húmedo; y de
la combinación de los cuatro, en diferentes proporciones, el resto de todos los
otros materiales del universo. Fácil y simple.
Sin duda, con estos conceptos,
estamos dando pasos ¿de gigantes? desde una protoquímica hacia una química
antigua (griega), antecesora de la alquimia, las bases donde asentaron
unos siglos después la química clásica y la química moderna.
Fue precisamente la primera la que puso fin a este modelo aristotélico al empezar a diferenciar, elementos antiguos (cuatro por ahora) de elementos químicos (ciento dieciocho en la actualidad) y a partir de ahí átomos, moléculas, sustancias, mezclas, reacciones químicas. Dos mundos de la mano: el molecular y el molar, lo micro y lo macro.
Elementos:
orden natural y método aristotélico
Pero no se quedó aquí el
ocupado griego Aristóteles pues también les confirió un “orden natural” de
colocación en este mundo: primero la ‘tierra’, como fuente de sustento y
civilización; después el ‘agua’, asociada a la vida, la purificación y
la emoción.
Tras ellas el ‘aire’,
esencial para la misma vida y a menudo asociado con el espíritu y el intelecto
en las culturas antiguas; y finalmente el ‘fuego’, símbolo de la
transformación y la purificación; indudablemente
era mucho el poder del método aristotélico, consistente básicamente en
observar de forma racional la naturaleza.
Y responder, eso sí, con demostraciones de tipo deductivo, a tres preguntas fundamentales: ¿Qué es?, su esencia o causa formal y material ¿Para qué es?, causa final y ¿Por qué es?, causa eficiente.
Preguntas respecto
a muy diversos aspectos del mundo natural, cultural y abstracto, cuyas respuestas,
basadas en postulados lógicos y racionales, le hicieron mantener su vigencia intelectual
durante siglos. Prácticamente hasta la llegada de la ciencia clásica y
moderna, que ya es estar vigente, con lo que eso tiene de bueno y de malo. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
2 comentarios :
Tenía entendido que eran cinco los elementos antiguos, le falta el éter
recuerdo haber estudiado el éter en química, ¿estoy equivocado?
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