‘Escuela de calor’ [CR-190]

[Esta entrada apareció publicada el 01 de julio de 2022, en la contraportada del semanario Viva Rota, donde también la pueden leer]

Con esas palabras finalizaba la semana pasada, hablándole de la reciente ola de calor padecida, y sobre la que un seguidor me puntualizaba que pertenecían a la canción de 1984 ‘Escuela de calor’ de Radio Futura, de su álbum ‘La ley del desierto / La ley del mar’. 

Es una de las más populares del grupo de los hermanos Auserón y Enrique Sierra, a la que la revista ‘Rolling Stone’ (2010) colocó en el número 8 de las 200 mejores canciones del pop-rock español. O sea que bien. Pero no es de la faceta musical de la que quiero hablarle sino, ya que hablamos de escuela y de calor, del nexo entre las ciencias implicadas: pedagogía, metrología, gramática o termodinámica ¿Cómo se nombran y simbolizan los grados de temperatura? ¿Qué se dice, grado centígrado o grado Celsius?

De estas expresiones, la primera es frecuente escuchársela a los meteorólogos, cuando nos dan el tiempo sea en radio o televisión, pero la segunda nos recuerda los tiempos escolares y a los profesores de física y química ¿Cuál debemos emplear? Pues bien, a modo de prontuario, estas son las claves. En rigor científico y según la escala (Celsius, Fahrenheit y absoluta o termodinámica), sus nombres son: grado Celsius, no grado centígrado ni simplemente grado; grado Fahrenheit, ambos con el nombre del científico en mayúscula; y kelvin con minúscula, no grado Kelvin. 

En lo que respecta a su simbología, el símbolo establecido es °C, consistente en un pequeño círculo superíndice (º) seguido sin espacio de la letra C y dejando un espacio entre la cifra y el símbolo (23 °C), no siendo correcto unir cifras con símbolo (23ºC) ni omitir la letra (23º) pues el círculo está reservado a los grados de ángulo.

Por cierto, el círculo no es ni un cero ni una “o” ni la subraya ni se le añade un punto como ocurre con el ordinal (23.º). Tres cuartos de lo mismo para el grado Fahrenheit (73,4 ºF) y, en cualquier caso y escala, tanto número como unidad deben estar en la misma línea o renglón, debiéndose adoptar la medida necesaria (espacio de no división u otra) para que así sea. 

Un detalle más, la normativa (SI) establece que el nombre de una unidad se debe escribir siempre con minúscula, mientras que su símbolo deberá ir en mayúsculas si deriva de nombre propio, por ejemplo: newton (N), segundo (s), vatio (W), gramo (g), julio (J) o metro (m). De modo que la temperatura es una clara excepción. Le dejo: ‘Arde la calle al sol de poniente, / hay tribus ocultas cerca del río / esperando que caiga la noche. / Hace falta valor, hace falta valor / ven a la escuela de calor’.

[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.

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