(Continuación) Este
reloj de tipo vertical declinante a poniente, construido en 1993,
realizado en azulejo cerámico y sito en la Plaza de Jesús Nazareno, lleva
dibujadas líneas continuas negras para las horas y amarillas para las medias
que, con numeración romana, abarcan desde las ocho de la mañana hasta las seis
de la tarde.
Entre otros datos
científico-técnicos, en su superficie lleva dibujados los signos y las fechas
del zodíaco, el año de construcción (MCMXCIII), información sobre sus autores
(L.F. ET J.J.M. FECERUNT) y una bellísima leyenda en latín SOLIS ARTISQUE OPUS’,
que podemos traducir por “trabajo y talento artístico del sol”. Como carece de
estilo (varilla), no tiene ninguna utilidad medidora siendo solo un adorno urbanístico
más. Sus coordenadas: 36° 37' 10,0" N; 6° 21' 46,1" W.
Reloj de sol de Vía Marciala. Situado en el
frontal del lienzo de muralla de la villa -de la que fue batería de la
Concepción (siglo XVII) orientada a poniente, y en la actualidad zona residencial
de veraneantes- no he encontrado de él constancia documental sobre su
antigüedad.
Construido en piedra y azulejos, este cuadrante solar vertical
carece de leyenda y en su limbo tiene trazadas, con numeración romana, solo las
líneas de las horas que abarcan desde las diez de la mañana hasta las ocho de
la tarde.
Su gnomon es
una pieza triangular de lado recto, y aunque su estado de conservación está
algo “olvidadito” en general, lo cierto es que aún funciona, siendo uno de los
dos que lo hacen. Unos centímetros por debajo de él hay una placa, desde el año
pasado oculta por una capa de pintura que se dio a dicho frontal, en la se
podía leer que fue restaurado en 1996. Sus coordenadas: 36° 36' 59,2" N;
6° 21' 32,7" W.
Reloj de sol de la calle Veracruz. Abandonamos por un
momento la línea de playa para adentrarnos en la villa, en concreto hasta el
número 11 de esta calle. Si se fijan, en la parte superior de la casa y
realizado en azulejo trianero, verán lo que parece ser un reloj de sol
vertical, pero no se fíen. Solo lo parece pues, como el de la Plaza Jesús
Nazareno, carece de aguja y por tanto de sombra que nos enseñe la hora.
Encargado por los
propietarios de la casa, familia Benítez Reyes, lo colocaron como adorno y
tiene sus líneas de las horas con numeración romana, también la de equinoccios
y, sobre todo, un latinajo como leyenda DOCET UMBRA, es decir, “la sombra
enseña”. Bellísimo. Les dejo con sus coordenadas 36° 37' 09,7" N; 6° 21'
28,0" y otro refrán, ‘Hasta un reloj parado tiene razón dos veces al
día’. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva,
si desean ampliar información sobre ellas.
[**] Esta entrada apareció publicada el 28
de junio de 2019, en la contraportada del semanario Viva Rota,
donde también la pueden leer.
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