(Continuación) Y mientras los primeros defendían que debía ser la antigüedad en la reválida del protomedicato, el criterio para ordenar las intervenciones en las juntas de médicos, los segundos apelaban a su condición de doctores titulados para tener preeminencia sobre los primeros. Reaccionarios cátedros de universidad que abogaban por el dogmatismo tradicional, frente a las ideas modernas representadas por Muñoz y Peralta y otros personajes asociados a la Veneranda Tertulia.
Disputas revestidas de cierta connotación científica,
acerca del valor de la innovación frente a la tradición, que trajeron consigo
la publicación de obras y folletos que, apoyados en la explicación de una
práctica médica concreta se convertían en excusa para defender unas teorías
científicas frente a otras. En este contexto y al igual que Diego Mateo
Zapata o Juan de Cabriada, también Muñoz y Peralta, publica sus
ideas y así, entre otras, en su Escrutinio phisico medico de un peregrino
específico […] de 1699, realiza una defensa de la ciencia moderna europea.
Y un año después, en la obra Residencia piadosa a la obra del Doctor Don Alonso Lopez Cornejo […] de 1700 define la ciencia como un producto de proceso continuo y unitario junto a la invocación a la libertad filosófica, haciendo un llamamiento a que los galenistas dieran a las nuevas ideas el valor que éstas merecían. Porque “el carácter progresivo y de hecho revolucionario” de la asociación no reniega de lo antiguo, pero sí reivindica la necesidad de comprobar, rectificar y también, retocar “posibles imperfecciones”.
En esa línea de rigor metódico la Tertulia toma
rumbos de gran seriedad y su labor la realiza bajo una pauta científica de gran
modernidad y originalidad, de modo que empieza a fraguarse la idea de
constituir una Sociedad Científica, que estuviese oficialmente
reconocida.
De ‘Veneranda
Tertulia’ a ‘Regia Sociedad’
Solo cuatro años más tarde, en 1697, es tal su prestigio científico que se solicita la protección y reconocimiento de la Corona para ella, lo que se consigue tres años después mediante la Cédula del Real Consejo firmada el 25 de mayo de 1700 por el rey Carlos II, último monarca de los Austrias. Y que, como es sabido, muere ese mismo año sin sucesión por lo que la entonces neonata ‘Regia Sociedad’ envió una comisión para cumplimentar al nuevo rey Felipe V, quien la acogió bajo su Real Patronato, despachando una Real Cédula en Barcelona el 10 de octubre de 1701, meses después de su toma de posesión como Rey de España. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
[**] El original de esta entrada fue publicado el 26 de mayo de 2025, en la sección DE CIENCIA POR SEVILLA, del diario digital Sevilla Actualidad.
ÍNDICE


_Crisis_m%C3%A9dica_sobre_el_antimonio.jpg)

No hay comentarios :
Publicar un comentario