“Primavera ven y cúrame el invierno”. Es lo que cantaba, va ya para dos décadas, la banda Fito & Fitipaldis en su canción ‘Las nubes de tu pelo’ perteneciente a su tercer álbum Lo más lejos, a tu lado de 2003, y creo que es un buen comienzo para el paseo virtual de esta semana dedicado, por obvios motivos astronómicos, a esta calle.
Ubicada en el distrito Macarena (41009), al NO de la
ciudad, abarca una longitud de 179 m que son los comprendidos entre la calle Los
Romeros donde empieza y la Niña de la Alfalfa donde termina.
Rotulada en 1971, es la primera de las tres vías con nombre de estación
astronómica que se encuentran en la barriada Hermandades del Trabajo y además
muy próximas.
Me refiero a calle Verano y calle Otoño, tres para un solo barrio, lo que no está mal, nada mal, aunque eso sí, del invierno no se sabe nada de nada en el barrio. Bueno ni en el barrio ni en todo el callejero sevillano, recuerde lo de la calle Sol de invierno.
Equinoccio
de marzo
Por motivos obvios le decía más arriba porque ayer
domingo -a las 16 h 33 min hora oficial en la península, Ceuta, Melilla y las
islas Baleares, las 15 h 33 min en Canarias o, las 15:33 UTC- tenía lugar el equinoccio
de marzo.
Un sucedido astronómico que por definición se produce
cuando el centro de nuestra estrella, visto desde el planeta, cruza el ecuador
celeste en su movimiento aparente hacia el norte, haciendo que sus rayos
incidan de la misma manera en los hemisferios norte y sur.
Cuando esto sucede, la duración del día y la noche prácticamente coinciden (12 h) en todos los lugares del planeta, de ahí que a esta circunstancia se la llame así, equinoccio (del latín aequinoctium, aequus nocte, “noche igual”), y de los que se dan dos a lo largo del año, este de marzo y el de septiembre.
Unas fechas que por convenio marcan la entrada de una
nueva estación (primavera u otoño) y además son cambiantes, quiero decir que no
suceden siempre en el mismo día. Veamos por qué le digo esto.
“No
importa cuánto dure el invierno, la primavera siempre llega”
Eso reza el dicho popular y aquí, en el hemisferio norte
o septentrional, ocurre con el equinoccio de marzo llamado por este motivo equinoccio
primaveral o vernal. Pero no debemos olvidar que, en el hemisferio
sur o meridional, acaban de salir del caluroso estío y lo que allí da comienzo
en este día es el otoño, por lo que también se le denomina equinoccio otoñal.
Lo que se presta a confusión. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
[**] El original de esta entrada fue
publicado el 21 de marzo de 2022, en la sección DE CIENCIA POR SEVILLA,
del diario digital Sevilla Actualidad.
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