[Esta entrada apareció publicada el 20 de mayo de 2022, en la contraportada del semanario Viva Rota, donde también la pueden leer]
De todos es conocida esta señal de socorro, la más utilizada internacionalmente a partir de su aprobación oficial en 1906 y que reemplazó a la hasta entonces utilizada en las transmisiones telegráficas, CQD. Unas siglas que popularmente eran interpretada como ‘Come Quickly, Distress’, algo así como “Vengan Rápido, Problemas”, aunque su auténtico significado era otro: CQ, de ‘Copy Quality’, un código de llamada general y D, de ‘Distress’ o sea “Problema”.
El caso es que fue sustituido por SOS, que podía ser
emitido fácilmente usando el código morse -con una sucesión de tres
pulsos cortos, tres largos y otros tres cortos- a la vez que, debido a su
sencillez y simpleza, era menos probable que su contenido se perdiera o
malinterpretara por interferencias. Un buen cambio.
Y aunque sabemos a ciencia cierta que la electromagnética señal no son tres letras separadas sino un único código continuo, no han faltado interpretaciones: ‘Save Our Ship’, “salven nuestro barco”; ‘Save Our Souls’, “salven nuestras almas”; ‘Send Out Succour’, “envíen socorro” o, como algunos exégetas piensan, ‘Si Opus Sit’, “si fuera necesario” o “cuando sea necesario”. En fin, la mayera imaginación al poder.
Es más que probable que al paseante roteño, si es un observador atento y curioso, la tripleta de letras le suene de algo, como de haberla visto en algún lugar de la villa. Y convencido estoy de que a poco que se esfuerce seguro que las recordará, eso sí por quintuplicado, a unos pocos metros sobre el suelo y pegadas sobre el cilíndrico y blanco fuste de hormigón del cuarentón faro (1980) del puerto deportivo, allá por levante, junto a la Puerta del Muelle.
Externamente el fanal es una nívea torre, adornada con una banda roja situada en su tercio superior, provista de una doble balconada y coronada por la luminosa linterna cubierta por una roja cúpula. En su interior hay una escalera de caracol, el faro no es visitable para el público, que nos lleva a su parte superior donde, gracias a sus lentes y los 27 m de altura, la lámpara de cristales irregulares incandescente de la cúpula proyecta su luz hasta unas 16 millas náuticas de distancia.Por cierto, ¿por qué quintuplican la tripleta de letras? ‘Nihil novum sub sole’.
[*] Introduzcan en [Buscar
en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si
desean ampliar información sobre ellas.
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