Le sitúo. Me refiero a la coreografía de la canción ‘Smooth Criminal’ (1987) de Michael
Jackson, y más en concreto a ese movimiento en el que los bailarines
consiguen inclinarse hacia adelante 45 º para, desafiando a la fuerza de la
gravedad, hacerlo con el cuerpo recto y sin caerse. Algo increíble pues la
mayoría de los bailarines, aunque tengan un tronco “muy fuerte”, solo consiguen
una inclinación máxima de 30 º ¿Cómo lo hicieron? ¿Fue un truco de magia?
¿Fuerza muscular sobrehumana? ¿O fue técnica, es decir, ciencia aplicada?
Pues hubo de los tres. Una parte trucada de
ilusionismo, la puesta en escena de todo espectáculo; otro tanto de ejercicio
muscular, no digo yo sobrehumano, pero si al alcance de muy pocos; y por
supuesto, el uso de unos zapatos especiales que el propio artista diseñó y
patentó (1992). Una magnífica condición física y una extraordinaria fuerza en
distintas partes del cuerpo como: el tendón de Aquiles, la parte
posterior de cada pierna y los músculos de la columna vertebral, a fin
de poder soportar semejante presión sin lesionarse.
Solo así se puede mantener la imposible relación
que se establece entre fisiología y física, cuando el cuerpo está
inclinado hacia delante y su centro de gravedad se desplaza de la segunda vértebra
sacra, mientras está erguido, a las articulaciones del tobillo y el
tendón de Aquiles. Y naturalmente los zapatos, con el hueco en forma de “v” de
su tacón que permite engancharlos a unos tornillos o pernos fijados en el suelo
del escenario. Es de esta forma como el cantante y sus bailarines pueden
inclinarse en un ángulo en principio imposible, al quedar los zapatos fijados
al piso del escenario y el cuerpo a los zapatos. Sin ellos, en términos de
biomecánica, es imposible de toda imposibilidad inclinarse hasta los 45 º.
Y por supuesto que, sin duda alguna, el artista
es oficialmente el autor del invento pues él lo patentó, sin embargo, no es
menos cierto que no fue el primero en realizar dicho número. No. Resulta que
existe un precedente español -más en concreto sevillano y de La Puebla de Cazalla para más seña-, protagonizado por José Gómez
Salvadori. Es de 1964 y pertenece al espectáculo que un grupo de payasos, ‘Les
Salvadori’, realizaron en el programa de televisión que presentaba Bing
Crosby. Pueden ampliar información y ver vídeos en el blog ‘Enroque de
Ciencia’.
¿Copió el estadounidense del español? A ciencia
cierta no se lo puedo afirmar, pero lo cierto es que parecerse se parecen y
mucho, por lo que lo dejo aquí. Juzguen ustedes. Lo que sí afirmo es que hay
que patentar siempre por si acaso, otra cuestión es la afirmación unamuniana
del ‘¡Que inventen ellos!’.
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva,
si desean ampliar información sobre ellas.
[**] Esta entrada apareció publicada el 20
de diciembre de 2019, en la contraportada del semanario Viva
Rota, donde también la pueden leer.
No hay comentarios :
Publicar un comentario