En el mismo podemos ver al físico alemán que tal día como hoy 8 de noviembre pero de 1895, descubrió de forma serendípica unas extrañas radiaciones que dio en llamar rayos X, al no tener ni la menor idea de lo que podían ser.
Sirva esta entrada como recordatorio y homenaje de tal crucial sucedido, en su ciento veinte (120) aniversario. Y ya de la que va, dos en uno, de la celebración de los ciento setenta (170) años del nacimiento del científico.
El sello también nos muestra un tubo de Crookes, donde se generan dichas radiaciones, y una supuesta estructura electrónica del átomo, pues no olvidemos que pasado el tiempo se supo que dichos rayos X o rayos Roentgen, como pasaron a llamarse en su honor, son fruto de las oscilaciones que experimentan los electrones más próximos al núcleo.
Por ejemplo los rayos X tienen un valor de frecuencia (f) comprendido entre mil diecisiete y mil diecinueve hercios (1017-1019 Hz). Lo que equivale a un valor de longitud de onda (λ) comprendido entre treinta y cero coma cuatro amstrongs (30-0,4 Å), es decir del tamaño mismo de los átomos, lo que tiene su aquél físico.
Nota bachillera
El hercio, de símbolo Hz, es el nombre que tiene la unidad de la magnitud física frecuencia (f) en el Sistema Internacional de Unidades (SI). Llamado así en honor al físico alemán Heinrich Rudolf Hertz (1857-1894), descubridor de la propagación de las ondas electromagnéticas, fue establecido en 1930 por la Comisión Electrotécnica Internacional (IEC, por sus siglas en inglés) y adoptado en 1960 por la CGPM (Conférence Générale des Poids et Mesures o Conferencia General de Pesos y Medidas).
El Ångström, de símbolo Å, es el nombre que tiene la unidad de la magnitud física longitud de onda (λ) en el Sistema Internacional de Unidades (SI).
Su nombre se debe al físico y astrónomo sueco Anders Jonas Ångström (1814-1874), que está considerado como uno de los fundadores de la espectroscopia.
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