sábado, 8 de noviembre de 2025

‘Ig Nobel’, 2025: PAZ (y 2)

(Continuación) Aunque concedido este año del Señor de 2025, el estudio científico en el que se basa este premio es algo anterior, de 2017, y lleva por título de ‘Dutch Courage? Effects of Acute Alcohol Consumption on Self-Ratings and Observer Ratings of Foreign Language Skills’.

Que más o menos podríamos traducir como “¿Valor holandés? Efectos del consumo agudo de alcohol en las autoevaluaciones y las evaluaciones de observadores sobre las habilidades en idiomas extranjeros”, y publicado en la revista Journal of Psychopharmacology 32: 116-122 (18 Oct 2017).

Dutch Courage? Effects of Acute Alcohol Consumption on Self-Ratings and Observer Ratings of Foreign Language Skills’

Metodológicamente dividieron el medio centenar de estudiantes en dos grupos, uno recibió una bebida con vodka (alcohol etílico, C2H6O), el grupo de prueba, y el otro solo agua (H2O) que actuó de control, y se les pidió que hablaran en neerlandés con dos nativos sobre una temática concreta, la experimentación animal. No me diga que no es ocurrente el tema.

Emplearon además una doble evaluación: una interna, en la que usando el audio de la grabación se les pidió que se autoevaluasen, curiosamente ellos no encontraron diferencia entre los dos grupos; y otra externa, realizada por nativos que sí la hallaron.

En concreto resultó más positiva para los estudiantes que habían consumido alcohol, sobre todo en la pronunciación, aunque sin diferencias significativas en gramática, vocabulario o argumentación. De ahí concluyeron que la ingesta moderada de alcohol puede reducir la ansiedad lingüística y mejorar la percepción externa de la fluidez, pero sin modificar la autopercepción de los hablantes.

Concluyendo, que es gerundio

¿Qué me dice? Por cierto, emplearon la misma bebida alcohólica que toma o tomaba el ficticio agente secreto preferido del blog, recuerde, los martinis de vodka y no de ginebra, además mezclado, no agitado. Tin tararan tan tantantan tin, ...

Ya, estoy con usted, tras releerme tampoco me casa mucho lo leído ¿qué tiene que ver la paz con la ingesta de vodka y el aprendizaje de un idioma? es más ¿por qué un premio, aunque sea el Ig?; en fin, preguntas en busca de respuestas como los seis personajes pirandelianos iban en busca de autor.

Y seguimos con “el club de la ingesta” y el que va a ser su quinto miembro, asociado en este caso con la especialidad médica de la pediatría, una rama de la medicina que involucra la atención de bebés-niños-adolescentes y que a partir del siglo XIX desarrolló su base científica creando los primeros hospitales. (Continuará)

[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.

 


No hay comentarios :