Años bisiestos y JJ. OO. (y 2)

(Continuación) Ya ve, la consabida, manida y resultona coletilla de la condición necesaria más no suficiente. 1900 no es un año bisiesto pero, uno, mantiene desde los anteriores juegos (1896) la periodicidad de cuatro años y, dos, hablamos de Juegos de Verano, que ésa es otra.

Resulta que, según la Carta Olímpica, existen dos tipos de juegos, los JJ. OO. de Verano y los JJ. OO. de Invierno, que tienen lugar con un intervalo de tiempo de dos años, de modo que los de verano se celebran durante el primer año de una olimpiada, y los de invierno durante su tercer año. Es decir que se van alternando a lo largo del tiempo. Y eso es todo desde el punto de vista lógico-matemático, si bien nos quedan algunos aspectos gramaticales acerca del uso de los términos.

Juegos Olímpicos y Olimpiada. Diferencias

Sin rodeos. Olimpiada es el periodo de cuatro años que transcurre entre dos Juegos Olímpicos consecutivos, que son la competición en sí misma.

Por ejemplo, y por concretarlo al año de marra, los Juegos Olímpicos de Londres 2012, oficialmente conocidos como los Juegos de la XXX Olimpiada,​ o más comúnmente como Londres 2012, fueron un evento multideportivo internacional, celebrado en la capital del Reino Unido entre el 27 de julio y el 12 de agosto de 2012. Y la Olimpiada comenzó justo al acabar éstos, el 13 de agosto, durando hasta el inicio de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, el 5 de agosto de 2016.

Así que no son lo mismo, a pesar de que incluso la Real Academia Española (RAE) decidiera contribuir a dicha confusión, admitiendo que se utilice la palabra Olimpiada como sinónimo de Juegos Olímpicos, aunque históricamente cada término tenga un significado diferente.

Acerca del término olimpiada. Gramática

Tan diferente que en la antigua Grecia era costumbre medir el transcurso del tiempo en olimpiadas en vez de utilizar los años, o sea que olimpiada era el periodo de tiempo entre y no los juegos en sí. Ya de la que va, y tras la consulta al diccionario, le diré de esta palabra que, aparte de la acepción como ‘Juegos deportivos universales que se celebran cada cuatro años’, tiene ortográficamente dos acentuaciones válidas. La llana olimpiada, con diptongo entre las vocales en contacto, la más frecuente en España, y la esdrújula olimpíada, con hiato en lugar de diptongo, cuyo uso se simultanea indistintamente en América.

También ha de saber que se escribe con minúscula salvo que se refiera a una (o a unas) en concreto, en cuyo caso se escribe con mayúscula inicial. Que por analogía con el plural de la expresión juegos olímpicos, es frecuente y admisible el uso del plural, olimpiadas u olimpíadas, con sentido singular. Y por último, en este caso por extensión, que puede designar también otras competiciones de carácter internacional. Y hasta aquí la nota cultureta gramatical.

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