¡Feliz 2025! Ciencias y artes

(Continuación) Y como muchos otros un número científicamente hablando muy llamativo, sobre todo desde el punto de vista de las matemáticas, y se lo argumento.

Número cuadrado

Entre otras curiosas propiedades matemáticas de nuestro protagonista, quizás la más popular sea la de ser un número cuadrado (perfecto), entendido como aquél que es entero y además cuadrado de otro entero, como ocurre con: el 1, 1² = 1; el 4, 2² = 4; el 9, 3² = 9; el 16, 4² = 16; y así hasta el de nuestro año 2025, pues 45² = 2025.

De ahí lo de cuadrado, ya que geométricamente podemos formar con esas cantidades un cuadrado de: 1x1, 2x2, 3x3, ..., 45x45 objetos por lado; ni que decirle tengo que, volviendo al calendario, existen otros “años cuadrados”.

Echando las cuentas resulta que el anterior año cuadrado fue 1936, 44² = 1936, es decir que han pasado ochenta y nueve años, una vida humana bien cumplida; pero es que el anterior año cuadrado fue 1849, 43² = 1849, es decir pasaron ochenta y siete años, dos menos que no está nada mal.

Eso sí, el próximo no será hasta el 2116, 46² = 2116, tendrán que pasar entonces noventa y un años, dos más, una edad a tener en cuenta si bien no este el detalle que me interesa resaltarle.

Único año cuadrado su vida

Si se fija, los años cuadrados se van distanciando en un periodo de dos años, así que, salvo algunas personas mayores que ya vivían en 1936 y algunos de los más jóvenes de hoy que puedan llegar al 2116, para el resto de mortales, la inmensa mayoría, 2025 será el único año cuadrado de sus vidas.

Por cierto, en 1936, que no podemos decir que fuera un buen año para España, Franco cumplía los 44, lo digo como “guiño casual” para los crédulos de las ocurrencias de la numerología, pero no se venga arriba; esta crédula ocurrencia es una demostrada pseudociencia, empezando porque la designación de los años es solo una convención humana, cultural y arbitraria.

De hecho, en otras culturas estamos en otro año, así que nada de nada, lo de los años cuadrados no es que sea ni bueno ni malo, es que es así; como nos canta el “noi de Poble Sec”, en ‘Sinceramente tuyo’ de su disco Cada loco con su tema de 1983: “Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”.

¡Feliz (1+2 +3+4+5+6+7+8+9)²!

Y vuelvo a los inicios, el subtítulo me llegó como una de las felicitaciones por Año Nuevo, justo el 1 de enero, y venía de parte de un viejo conocido, un amable y ocurrente matemático, “responsable” de muchos de los temas sobre los que escribo en relación a esta ciencia exacta. (Continuará)

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