Einstein, Nobel y Relatividad. Nominaciones fallidas: Gullsstrand, Oseen, Hasselberg

(Continuación) Y lo cierto es que ni la formación universitaria ni la experiencia del médico sueco, carente prácticamente de conocimientos profundos sobre física y matemáticas, eran las más adecuadas para realizar dicho informe nobelero y relativista. Pero, para ser sincero, hay que decir que intentó poner remedio, al menos al principio.

Preparando el informe

Y pidió le mandó el informe, para que lo supervisara, a un profesor de física teórica de la Universidad de Uppsala, experto en elasticidad de cristales líquidos, Carl Wilhelm Oseen (1879-1944) quien tras leerlo se lo remitió advirtiéndole de los diversos errores que contenía fruto de su incorrecta comprensión de la relatividad.

Unos errores que Gullsstrand corrigió, o al menos lo intentó por un tiempo, y volvió a remitirle quien se los volvió a desmontar a vuelta de correo, y así una y otra vez hasta que al oftalmólogo se le agotó la paciencia.

Entonces el profesor, preocupado y temiéndose lo peor, como así fue, escribió al Comité advirtiendo de la debacle científica que podía significar, seguir manteniendo a Gullsstrand como experto a la hora de evaluar una física que ni entendía ni podía entender.

Informe contra Einstein, 1921

Y desde su impaciencia personal e ignorancia relativista, nuestro oftalmólogo sueco presentó un informe negativo e inusualmente largo, de cincuenta páginas, denostando ambas teorías, especial y general, por erróneas, y defendiendo que no debía otorgárseles el premio a unas ideas tan extremadamente especulativas.

Lo malo del asunto es que no solo era su dictamen el que estaba en contra, el propio Comité, receptor del mismo, no necesitaba ser convencido en ese sentido, dado que por un motivo u otro a sus miembros no le gustaba en absoluto las susodichas teorías de la invarianza.

Y lo peor es que no quedaba ahí la cosa, hasta Hasselberg, ¿lo recuerda?, escribió desde el mismo lecho de muerte: “Es muy improbable que Nobel considerara que unas especulaciones como esas fueran dignas del premio”. Para los miembros del Comité estaba claro que este año tampoco sería el del alemán, además, ellos proponían otro físico como candidato.

Academia versus Comité

No obstante, para entonces, la situación del susodicho Comité Nobel de Física se había vuelto un tanto indefendible y hasta surrealista. (Continuará)

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