Humor, por lo que de burla fina
y disimulada tiene el texto. Arte, por estar el grafiti considerado una forma
de expresión artística callejera. Y, ciencia, pues la ortografía es el conjunto
de normas que regulan la escritura de una lengua, acepción que hoy nos trae aquí aunque también dicho término, desde el campo de la geometría, es una disciplina que se ocupa de
la delineación del alzado de un edificio u otro objeto.
Pero a lo que vamos. Un grafiti escrito con aerosol
negro y plagado de faltas de ortografía cometidas a propósito, es una obviedad, con el claro objetivo de quejarse de una necesidad: la de que se vuelva abrir la
biblioteca, de propiedad estatal pero gestionada por la
Comunidad de Madrid desde 1988 y lleva cerrada desde 2019.
No hay duda alguna acerca
de la importancia del papel que juegan las bibliotecas en la educación, así que,
en mi prescindible opinión, se trata de una petición argumentada, al margen del
método empleado para llevarla a cabo.
No es poco lo enrocado sobre
los grafitis (si está interesado puede entrar en la categoría del blog, Grafitis científicos, que cuenta con casi 450 entradas) por lo que no me reitero, pero el debate está ahí. Aunque
los grafitis desde siempre han sido una forma de activismo ciudadano, ¿cómo los
ve usted?: puro vandalismo callejero o expresión artística urbana, un acto ilegal
o un arte (¿quizás el décimo?) con cierta influencia social.
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva,
si desean ampliar información sobre ellas.
1 comentario :
Hay muchos con faltas de ortografía por ignorancia gramatical.
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