(Continuación) Es el mismo año en el que el asunto salta a la gran pantalla con el taquillazo de Encuentros en la Tercera Fase (1977), película donde Spielberg hizo uso de una de las demenciales 'teorías' explicativas del misterio, eso sí, dándole una vuelta de tuerca más.
Por supuesto eran los extraterrestres los que estaban
detrás de este misterio, eran seres procedentes de otros mundos los autores de todos
estos sucedidos pero, no queda ahí la cosa, no, los hasta entonces
desaparecidos aviones, junto a sus tripulaciones, del renombrado ‘Vuelo 19’, ¿recuerda? aparecen en la película.
Sí, lo hacen al comienzo de la
misma, en una escena en las que se ven las seis (6) naves intactas, vacías y
posadas en el desierto de Sonora, y después, al final, son sus tripulaciones, veintisiete
(27) personas, los que salen de una gigantesca nave nodriza extraterrestre en otra
emocionante y emotiva escena. En fin, cine, cine, cine, más cine por favor…
Posibles causas acientíficas y científicas
Desde entonces, la mayoría de los escritores paranormales que en el mundo han sido, son y serán, han asociado la supuesta letalidad de la zona triangular con todos y cada uno de los argumentos imaginados y por imaginar, y cuando le digo con todos, es con todos.
Desde los extraterrestres,
que secuestran humanos con fines inconfesables; hasta la presencia de la Atlántida,
con una antigua, ¿actual?, actividad atlante en la zona; pasando por los
antañones y medioevos monstruos marinos, las más modernas deformaciones espacio-temporales
o los campos de gravedad inversa, signifiquen esas cosas lo que ellos crean que
signifiquen.
Mientras, los científicos
están a lo suyo, la elaboración de hipótesis que se pueden probar, y señalan
como posibles orígenes para dichos sucedidos: ciertas anomalías magnéticas, la existencia
de trombas marinas o la formación de grandes erupciones de gas metano, CH4
(g) en el fondo del océano.
Aunque es más que probable, suele suceder en casos como éste donde existe una abundante panoplia de fenómenos diferentes, que la respuesta esté en una combinación de varios de estos factores.
Pérdida de tiempo y esfuerzos
Desde el punto de vista
científico, es en lo que se pueden resumir los intentos de explicación de estos
autoproclamados investigadores de lo paranormal en lo que se refiere a las
causas científicas de la supuesta fenomenología; claro que sus intereses
llevaban y llevan otra dirección, una como más crematística, ya sabe. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva,
si desean ampliar información sobre ellas.
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