domingo, 2 de septiembre de 2018

Solsticio de verano [CR-02]

Cuando pose su mirada sobre estas líneas llevaremos inmersos algunas horas y de forma plena, en la estación estival astronómica y de forma no tan plena, en la meteorológica. Que no es lo mismo astronómico que meteorológico y, como decía mi abuela, “el tiempo está loco”.
Exactamente serán las transcurridas desde las 12 h 7 min del 21 de junio, hora oficial peninsular, cuando se produjo el solsticio de verano. Un fenómeno cósmico iniciador del  estío que durará 93 d y 15 h, terminando el 22 de septiembre. Es lo que tiene el verano, que dura exactamente lo que tarda en llegar el otoño.
Una fecha de inicio que por cierto no es siempre la misma y que a lo largo de este siglo caerá en los días 20, 21 y 22 de junio, fecha oficial española. La más tempranera tendrá lugar en sus postrimerías (2096), ya veremos quienes están aquí para ratificarlo, y la más tardía ya ocurrió pues fue en el 2003.
¿Por qué comienza el verano en esos días?
Como muchos de los asuntos humanos, el inicio de las estaciones también es fruto de un acuerdo y en su caso, por convenio, viene dado por aquellos instantes en los que la Tierra ocupa unas determinadas posiciones en su órbita alrededor del Sol.
En el caso del verano esta posición se da en el punto de la eclíptica en el que el astro alcanza su posición más boreal. Así que solsticio es un término astronómico relacionado con la posición del Sol en el ecuador celeste, y el día en el que esto sucede alcanza su mayor declinación Norte.
Una altura máxima al mediodía  que durante varios días apenas cambiará, de ahí que se le llame solsticio, que proviene del latín ‘solstitium’ o “Sol quieto” y alude a la impresión que produce a simple vista, de estar quieto en el cielo.
Por supuesto que esto que le digo es para el hemisferio norte desde donde escribo, porque justo en ese mismo instante pero en el sur, lo que se inicia es la estación del invierno, una importante cuestión de perspectiva.
Acerca del soslticio
Y para que no la pierdan, en lo que concierne al solsticio de verano, han de saber que la expresión se corresponde con un hecho singular. Trato de decir que dura sólo un momento, que el cambio astronómico de estación se produce instantáneamente.
Así que no es una fecha, ni dura un día entero, aunque acostumbremos a llamar solsticio al día en el que ocurre. Por el contrario el cambio meteorológico no se produce de forma repentina. A causa del doble y continuo movimiento de rotación y traslación del planeta, tiene lugar de forma gradual y constante con el transcurrir de días, semanas y meses.
Pueden ampliar información sobre el tema tratado así como dejar sus preguntas, comentarios, sugerencias, quejas, en fin todo aquello que consideren oportuno, entrando en enroquedeciencia.es
Y para acabar la cita de hoy: ‘En junio el día veintiuno es largo como ninguno’.
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.


[**] Esta entrada apareció publicada el 22 de junio de 2018 en la contraportada del semanario Viva Rota, donde también la pueden leer.




No hay comentarios :