jueves, 8 de diciembre de 2011

Duns Scoto, el científico

Scoto es el iniciador de un grupo de pensadores que, en el tardomedioevo del siglo XIII, realizó un extraordinario trabajo científico. 

Una labor que nuestro Papa Benedicto XVI reconocía en el 2006, ante los representantes de la Ciencia en el Aula Magna de la Universidad de Ratisbona.

Allí mencionó el papel de Duns Scoto en la resolución del difícil problema de la relación entre fe y razón. Por ahora poco más que decir del escolástico, desde el interés de esta entrada.

Pero sí de su discípulo Guillermo de Occam (1280-1349), quien continúa esta línea de pensamiento sobre la separación que debería existir entre fe, creencia o credulidad y la razón.

Una idea que no está nada mal para ser del siglo XIV.

Y en este lógico empeño aplicó el principio que hoy es conocido como la Navaja de Ockham.

Viene a decir que, si hay varias explicaciones igualmente válidas para un hecho, deberemos escoger siempre la más simple.

En realidad no era suyo, se lo escuchó a Duns Scoto. Ya hemos tratado a este científico y su navaja en el programa.

Continúa esta labor iniciadora e iniciática de la Ciencia su discípulo Jean Buridan (1300-1358).

Defensor del libre albedrío y crítico con las ideas físicas de Aristóteles, Buridan se nos muestra como un agresivo valedor del principio de causalidad, y un revitalizador de la teoría del ímpetu del griego Filopón.

Un concepto dinámico, el de la causalidad, que dio lugar a la Primera Ley de la Dinámica o Ley de la Inercia de Isaac Newton. También estos científicos han sido enrocados ya, recuerden el asno de  Buridan que tanto dio que hablar.

Y por supuesto, en esta rápida incursión no podemos olvidarnos de Nicolás de Oresme (1323-1382), un genio intelectual y, probablemente, el pensador más original del siglo XIV.

Sin duda alguna Oresme es uno de los principales fundadores de la ciencia moderna.

Tocó todos los campos del saber de su época, o casi todos. Economía, Matemáticas, Física, Astronomía, Filosofía, Psicología, Teología y Musicología.

Además combatió fuertemente el racismo y la astrología.

También introdujo un método para expresar gráficamente las velocidades y con el que representó el movimiento uniformemente acelerado (MUA).

Incluso especuló sobre la posibilidad de que hubiera otros mundos habitados en el espacio. Y así, ya les avisé, un largo etcétera

Es evidente, que para ser justo con Nicolás de Oresme, habrá que dedicarle una entrada en exclusiva. Me enroco la idea en la moleskine.


2 comentarios :

un seguidor dijo...

No tenía ni idea ni de la película ni del "científico".
Como siempre de lo más curioso.

Rodolfo Plata dijo...

JAQUE MATE A LA DOCTRINA JUDAIZANTE DE LA IGLESIA. La importancia de la crítica a la cristología de san Pablo, radica en que nos aporta los elementos de juicio necesarios para visualizar nítidamente __la omisión capital que cometió Pablo en sus epístolas al mutilar al cristianismo de su doctrina más importante. Desechando la prueba viviente en Cristo hombre que nos confirma que es posible alcanzar la trascendencia humana practicando las virtudes opuestas a nuestros defectos hasta adquirir el perfil de humanidad perfecta, patente en Cristo (cero defectos), que nos da acceso a las potencialidades del espíritu (doctrina sustentada por filósofos y místicos)__ Y la urgente necesidad de formular un cristianismo laico enmarcado en la doctrina y la teoría de la trascendencia humana, a fin de afrontar con éxito: el ateismo, el islamismo, el judaísmo, el nihilismo, la nueva Era y la modernidad, que amenazan con sofocar el mensaje universal de Cristo. http://es.scribd.com/doc/73946749/Jaque-Mate-a-La-Doctrina-Judaizante-de-La-Iglesia