Les decía que antes que Hirst, otros artistas también fueron incomprendidos y criticados y sus obras consideradas como controvertidas. Y de ellas, algunas, incluso terminaron siendo encumbradas por los expertos y, sus autores, convertidos en clásicos.
Yendo marcha atrás en el tiempo les traigo una terna. Una caja de esponjas, un urinario público y una caja de mierda. Ha leído bien. Y sí, para algunos son auténticas obras de arte.
Que quieren que les diga. A mí este tipo de afirmaciones me superan. Yo lo veo como una cuestión de sensibilidad.
Una sensibilidad de la que, es evidente, adolezco. Pero bueno. Empecemos.
Caja de brillo
La primera es de 1964 y ése es su nombre ‘Caja de brillo’ de Andy Warhol. Por si no lo recuerda, Brillo, fue una popular marca de esponjas de viruta de acero para limpiar la vajilla. Y la obra artística, que está considerada por muchos como una auténtica tomadura de cabello, supone, junto con las latas de sopa Campbell, el paradigma del Pop Art. Sin comentario. (En el futuro todo el mundo será famoso durante quince minutos. Todo el mundo debería tener derecho a quince minutos de gloria).
Mierda de artista
En este caso el autor no se anduvo con remilgos. Literalmente es eso. Si me lo permiten no lo voy a repetir. Hasta donde sé el MoMA de Nueva York, la Tate Gallery de Londres y el Centro Pompidou de París tienen algo en común: una lata de conserva con heces en su interior. No me pregunten más porque ni sé, ni quiero saber, más. Bueno les diré que la obra (y las heces) son del artista Piero Manzoni, que realizó un lote de noventa (90) piezas en 1961. Siete docenas y media de arte escatológico.
La fuente
Si la ven, es probable que piense que su título es todo un eufemismo. Del francés Marcel Duchamp, recibió una lluvia de críticas al presentar este urinario masculino en la Exposición de la Sociedad de Artistas de París de 1917. De hecho, en aquel momento fue rechazada y excluida de la misma. Natural, me dirá usted. Sí, de acuerdo. Pero es que ahora está considerada como una de las obras de artes más importantes del siglo xx. Qué me dice.
Es lo que tiene el paso del tiempo. Que todo lo puede.
He dejado para otra entrada una “joya” más. La más antigua de esta pequeña colección de obras de arte controvertidas y que, a mi corto entender, sí es arte.
Se trata de ‘El origen del mundo, 1866’ de Gustav Coubert. Una pintura polémica y controvertida, al que le tendremos que abrir, incluso, un televisivo CSI.
2 comentarios :
Me resulta extraña esta entrada en su blog. Aunque me parece muy cultural.
Enhorabuena
¡Qué fuerte!
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