El sucedido espacial es de los que se catalogan como una misión histórica, ya que la nave espacial estadounidense va a aproximarse a, tan solo, unos doce mil quinientos kilómetros (12 500 km) del planeta enano. Que es lo más cerca que se ha estado nunca de él.
Y en el doodle se representa al planetoide en el espacio, en el momento en el que la nave en movimiento se acerca. Ninguna hasta ahora había llegado a donde la New Horizons.
De hecho, ya por sí mismo, éste es un motivo más que suficiente, para haber viajado hasta el noveno (9 º) “planeta clásico”, el último en ser visitados por una misión espacial.
Digo lo de clásico, porque ya saben que en 2006, por decisión de la Unión Astronómica Internacional, UAI, (en inglés International Astronomical Union, IAU), Plutón perdió su estatus de planeta y pasó a ser un "planeta enano".
Creo que ya se lo he comentado en otro momento, pero por si no es así, y para no perder tiempo, la UAI es una especie de agrupación de sociedades astronómicas de diferentes países, que está encargada entre otros estándares de astronomía, de darle nombres a planetas y otros cuerpos celestes.
Misión New Horizons
Es decir casi coincidente con la fecha en la que el pequeño y gélido planeta del confín del Sistema Solar, perdiera esa condición y se convirtiera en un “planeta enano”. En concreto la sonda fue lanzada desde Cabo Cañaveral en un cohete Atlas V, el 19 de enero de 2006.
Y tan solo unos meses después, en Asamblea General de la Unión Astronómica Internacional (UAI), celebrada en Praga el 24 de agosto de 2006, se creaba una nueva categoría planetaria llamada plutoide, en la que, con otros cuerpos, entraba de lleno Plutón.
Y en esos nueve (9) años que han transcurrido desde entonces, la New Horizon -con sus cuatrocientos ochenta kilogramos de masa (480 kg) y a cuarenta y nueve mil ochocientos ochenta y nueve kilómetros por hora (49 889 km/h) de velocidad, creo que es la segunda más rápida que ha surcado el espacio- habrá recorrido la astronómica distancia de cuatro mil ochocientos veintiocho millones de kilómetros (4 828 000 000 km).
Que decir se dice pronto, pero que se tarda, y cuesta, mucho en hacerlo.
A toda velocidad y sin freno
Como resulta que no lleva combustible para frenar, a fin de hacerla más ligera, la sonda ni se detendrá ni se posará sobre Plutón. De modo que sólo durante el tiempo que lo esté sobrevolando, será cuando pueda tomar imágenes y realizar mediciones. Unas horas tan solo, que convienen rentabilizar lo más posible.
De la teleexploración plutoniana se encargarán los siete (7) instrumentos que porta y, a partir de las mediciones que realicen, podremos conocer interesantes aspectos científicos como: la composición de su atmósfera, la interacción de ésta con las partículas que expulsa el Sol, etcétera. (Continuación)
No hay comentarios :
Publicar un comentario