viernes, 18 de mayo de 2012

Otros vencejos


Ya les avisé. Hay otros vencejos en la ciudad.

Y de los que yo les empecé a hablar hace unas entradas, tengo para mí, que no son los mismos que estos últimos.

Aquellos no anidan en altos campanarios de antiguas iglesias, ni en muros de céntricos palacios, ni en cornisas de casas solariegas.

A los que yo me refiero, hicieron sus primeras nidadas al otro lado del río. Al lado del arrabal trianero. En la otra orilla de Sevilla.


En los huecos de la inacabada estructura de una torre, que en otro tiempo existió y que durante decenas de años estuvo inconclusa. La que en Sevilla se conoce como torre de los Remedios, la de la avenida República Argentina.

Donde se llegó a constituir una gigantesca colonia de vencejos. En pleno asentamiento humano, su lugar favorito.

Es casi imposible que la propia Naturaleza, les pueda ofrecer un entorno con tal cantidad de huecos para sus nidadas, como el que les brindó este edificio.

Impresionaba ver el tamaño de la colonia cuando, al atardecer, sobrevolaba la zona. Una enorme y negra mancha que cubría el cielo y sobrecogía con el estruendo de sus chillidos ¡Qué chillidos!

Hay lugares en los que son conocidos como “pájaros del diablo”, por lo desagradable de su vocinglería. Pero están equivocados al llamarlos así.

Me han contado que los vencejos, en realidad, son las almas de aquellos sevillanos que, aunque se fueron, gustan de volver. Qué cosa.

Sevilla. Donde lo efímero es eterno. Lo igual es diferente. Y lo distinto es idéntico. Vencejos de mi calle. Vencejos de mi barrio. Vencejos de la torre de los pájaros. Una historia de otros tiempos.




2 comentarios :

Anónimo dijo...

¿De dónde saca las citas que pone al inicio del blog? ¿Dónde las puedo leer? Me gustaría tenerla copiadas.

Una seguidora del blog dijo...

¿Va a continuar? Es muy agradable de leer