Se trata de un fragmento del programa 'Channel Nº4' de Cuatro, en el que la soprano española Ainhoa Arteta (1964) rompe una copa de
cristal sólo con la voz.
Aunque la
calidad del vídeo es la peor de todos, sin embargo su visionado es quizás el
más interesante, porque en él aparecen algunos de los factores comentados.
Veamos.
La copa es de
una calidad media-alta, lo que
facilitará una única frecuencia de vibración.
Pero la soprano
lo que hace es cantar un aria, es decir emite ondas sonoras de diferentes frecuencias, que no sólo
muchas se anularán entre sí sobre la copa, sino que las restantes no serán
resonantes con la copa.
Además la copa está
boca arriba, una posición que no
facilita que se concentren en su interior las ondas posibilitando así la
resonancia.
De ahí que la
Arteta, tras un intento fallido, realice dos cambios en el experimento.
Uno invirtiendo
la copa que ella justifica por la entrada de armónicos. Y otro decidiendo hacer una escala de tonos en vez de cantar una canción. Perfecto. Lo llaman ciencia empírica.
A los cuatro
segundos, quizás con un fa, perdonen
mi ignorancia si no es así, la copa saltaba hecha añicos.
1 comentario :
Me ha parecido muy pedagógico su planteamiento. Le felicito por su blog.
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