lunes, 22 de junio de 2015

Verano de 2015. Inicio astronómico (y 3)

(Continuación) Por la misma razón, en la Antártida ocurre alrededor del 21 de diciembre. Una duración que, por cierto, no depende de la salida y puesta del Sol. Bueno, mejor me explico.

Salida y puesta del Sol
Dejando a un lado que no es el Sol el que se mueve alrededor de la Tierra, sino al contrario. Lejos queda el dilema Heliocentrismo versus Geocentrismo.

Y aceptando aquello que se ha dado en llamar “Hablando como Ptolomeo, pero pensando como Copérnico”, lo cierto es que no es infrecuente encontrar a más de uno, que piense que el día más largo del año será también el día en el que el Sol salga más pronto y se ponga más tarde.

“Elemental, mi querido Watson”. Ya, pero ocurre que no es así. Y no lo es por doble motivo.

Uno. La órbita de la Tierra alrededor del Sol no es circunferencial sino elíptica. Y dos, el eje de la Tierra está inclinado en una dirección que nada tiene que ver con el eje de dicha elipse.

Lo que conlleva que el reloj solar y nuestros relojes, que están basados en un Sol medio ficticio, estén desajustados. Y así, el día en que el Sol sale más pronto es el 14 de junio, mientras que el día en que el Sol se pone más tarde es el 28 de junio.

Luego no coinciden. Por lo que no podemos computarlos juntos en las cuentas del día más largo.

Distancia al Sol
Y a propósito de la trayectoria terrestre, dada que no es circunferencial, resulta que la distancia a nuestro astro no es constante a lo largo del año. Trato de decirles que unas veces está más cerca y otras más lejos.

Pues bien, justo en estas fechas es cuando se da el máximo alejamiento anual entre la Tierra y el Sol.

Un mayor alejamiento que hace que el planeta se mueva más lentamente a lo largo de su órbita elíptica durante el verano (lo estudiamos en los tiempos bachilleres como segunda ley de Kepler) y que la duración de esta estación sea mayor que otras

Conocido como afelio, tendrá lugar el próximo día 6 de julio, siendo la distancia de algo más de ciento cincuenta y dos millones de kilómetros (152 000 000 km).

Más o menos unos cinco millones (5 000 000) más que a principios de enero, cuando la distancia al Sol alcanza su mínimo anual (perihelio).

Sobre la actividad solar
De la actividad solar, ya saben, ese fenómeno de nuestro astro caracterizado por la presencia en su superficie de manchas, fulguraciones y protuberancias, y que en la Tierra produce alteraciones en la propagación de las ondas de radio y una mayor presencia de auroras polares, pues de eso, casi lo de siempre.

Sigue un periodo de aproximadamente once (11) años, y está asociada al ciclo magnético del Sol. En la actualidad nos encontramos en el ciclo solar número veinticuatro (24) que comenzó en diciembre de 2008 y alcanzó su máximo en abril de 2014.

Según las estimaciones realizadas por NOAA y Space Weather Prediction Center, durante el verano el número de manchas solares alcanzará valores entre 48 y 74.






2 comentarios :

un radioyente dijo...

¿Qué diferencias hay enrtre el afelio y el perihelio, que nombró en el programa de la semana pasada?

Anónimo dijo...

Hay numerosas entradas en el blog donde lo explica