jueves, 29 de agosto de 2024

Impresionismo y física cuántica. “Tecnología impresionista”

(Continuación) El del tubo metálico con tapón de rosca para guardar la pintura al óleo que permitía a los artistas pintar en el exterior, manteniendo vivos los colores y sin que se secasen los pigmentos.

Toda una aportación que revolucionó el mundo del arte, posibilitando el impresionismo y demás movimientos pictóricos, y que debemos al polímata estadounidense John Goffe Rand (1801-1873).

Él patentó en 1841 el primer tubo de pintura para artistas hecho de hojalata, lámina de hierro o acero estañada por las dos caras, del que dicen que el propio Renoir dijo: ‘Sin pinturas en tubos, no habría habido Cézanne, ni Monet, ni Sisley ni Pissaro, nada de lo que los periodistas llamarían más tarde Impresionismo’.

Tal vez algo exagerado, si es que lo dijo, pero el caso es que hasta entonces si un pintor salía con sus bártulos a pintar al aire libre, cargaba sus pigmentos en vejigas de cerdo que, por el inevitable contacto con el aire se terminaban secando debido a la oxidación, no pudiendo además usar después lo que sobrara.

Coquelicots (1873) y Port of Le Havre (1874)

Solo gracias a esta nueva técnica podemos disfrutar, entre otras, de estas dos obras de arte de Monet que pintó en esos días que decidió salir al aire libre a captar la luz de donde fuera; sí, son dos buenos ejemplos de la influencia del tubo metálico de pintura en el impresionismo en particular y en la pintura en general.

Gracias a la facilidad que el tubo con tapón de rosca ofrecía para el traslado (menor tamaño y dureza), conservación (los colores permanecían vivos) y reutilización de las pinturas (no se secaban), los artistas pudieron crear nuevo colores in situ, un factor sin duda necesario, pero no suficiente para el surgimiento del arte.

No, a pesar de la supuesta afirmación renoiriana, el impresionismo no puede atribuirse simplemente a la fácil portabilidad de la pintura, es demasiado simple, y nada lo es en esta vida. El caso es que el invento de Rand ayudó y no poco, fue una revolución en la historia del arte, pero de ahí a ...

Granjero, ebanista, artista autodidacta e inventor, la idea le surgió a nuestro hombre a partir de su pasión por la pintura y curiosidad, fue un hombre talentoso que viajó por todo el mundo como retratista de personajes notables, incluidos miembros de la familia real.

Además, tuvo muchas otras ideas y realizó otros tantos inventos, por ejemplo, un sistema de lentes para realizar retratos muy precisos, si bien la mayoría de ellos no fueron tan bien recibidos y no tuvieron el éxito comercial del tubo. (Continuará)

[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.

 

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