(Continuación) Sigo con nuestro hombre en el bar de striptease donde, al parecer, se pedía un 7 Up para beber, disfrutaba del espectáculo que ofrecían y, en ese ambiente de desconexión, a veces reflexionaba sobre ciencia.
Y las conclusiones a las que llegaba las plasmaba por escrito en las servilletas donde, incluso, escribía alguna ecuación y dibujaba alguna que otra gráfica. Es así, pero no es menos cierto que también plasmaba en ellas, digamos, otras ideas. Creo que lo mejor es que lo deje aquí y continúe yendo por partes.
‘La
Física es a las Matemáticas lo que el sexo es a la masturbación’
Hace unos años, y a propósito de una entrevista a un exdiscípulo de Hawking reconvertido en divulgador científico, un periodista iniciaba la misma con la, para él, epantante frase: “Afirmaba el nobel Richard Feynman que la física es a las matemáticas lo que el sexo es a la masturbación”.
Que es un magnífico arranque, no le voy a decir lo contrario, lo malo es que dicha afirmación no es cierta. Por lo que tengo averiguado esta frase, o una que se le parezca lo suficiente, no aparece en ningún texto suyo.
Y es sólo en 1995 (Feynman murió siete años antes, en 1888) cuando el físico teórico y divulgador estadounidense Lawrence Krauss (1954) se la atribuye, al comienzo de un capítulo en su obra de divulgación ‘Fear of Physics’, “Miedo a la Física”.
Una atribución de la que no cita la fuente -una mala e inexcusable praxis como científico y escritor-, por lo que he de concluir que no se puede ni debe, bajo ningún concepto, atribuírsela a nuestro hombre de los bongos. Algo parecido a lo que ocurre con la siguiente frase, también, pretendidamente feynmanita.
‘La
física es como el sexo:
Seguro que da alguna compensación práctica, pero no es
por eso por lo que la hacemos’. Aparece también en la referida
entrevista, por cierto, no se lo dije, pero el exdiscípulo de Hawking entrevistado
no es otro que el físico y escritor francés Christophe Galfard (1976), autor
del libro de divulgación ‘The Universe at Hand’, “El universo en tus
manos” de 2015, y razón por la que lo entrevistaban.
Y donde, viniéndose arriba, el periodista de marra se dejó caer con la frase que intitula más arriba, un profesional de quien no revelaré su identidad pues ya conoce el refrán popular, algo embuido de confesión católica, ‘Se dice el pecado, pero no el pecador’. Pues eso.
De la frase ni que decirle tengo que no hay el menor
rastro de su presencia en toda la documentación existente, y créame no es poca;
no existe la menor referencia a que, en alguna ocasión, fuera dicha o escrita
por él. Como suele decir alguien del universo televisivo ‘Sálvame’: “A
mi no me consta”. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva,
si desean ampliar información sobre ellas.
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