(Continuación) Igualmente trillón es una voz de procedencia francesa, trillion (de tri- “tri-” y de la terminación de million “-llón”) y equivale a un millón de billones, es decir, la unidad seguida de dieciocho ceros, 1 000 000 000 000 000 000 o, en notación científica, 1018. En el SI y desde 1975 se representa mediante el prefijo “exa-”, voz de origen griego cuyo símbolo es “E” mayúscula.
En busca de respuestas. Matizaciones
cuantitativas: Millón y millar
Ya de la que va, y por
haber sido utilizado en esta breve exposición, recordar del término millón
que etimológicamente proviene del italiano milione (del latín, mille)
y equivale a mil millares es decir la unidad seguida de seis ceros, 1 000 000
o, en notación científica, 106.
En el SI y desde
1960 se representa mediante el prefijo “mega-”, voz de origen griego
cuyo símbolo es “M” mayúscula. Y claro está, nuevamente por alusiones,
tendremos que hacer tres cuartos de lo mismo con el otro vocablo de más arriba.
Millar es una voz de procedencia latina, milliāre y equivale a mil unidades, es decir, la unidad seguida de tres ceros, 1000 o, en notación científica, 103. En el SI y desde 1975 se representa mediante el prefijo “kilo”, voz de origen griego cuyo símbolo es “k” minúscula.
En busca de respuestas. Matizaciones
cuantitativas: Unidad y millardo
Y en puridad, como no podría
ser de otra forma, aquí va lo suyo de la palabra unidad o uno, primero
o segundo de los números naturales, ya sabe que el tema ordinal aún sigue
en discusión, y sin duda un número que ni es primo ni compuesto.
Del latín unus
(uno, único), evidentemente no viene acompañado de ceros, 1, en notación
científica se expresa 100 y en el SI no tiene prefijo. Y nada
más que añadir por ahora, algo que no se puede decir de nuestro siguiente
protagonista.
Del término millardo ha de saber que deriva de la francesa milliard) y equivale a mil millones, es decir, la unidad seguida de nueve ceros, 1 000 000 000 o, en notación científica, 109. En el SI y desde 1960 se representa mediante el prefijo “giga-”, voz de origen griego cuyo símbolo es “G” mayúscula.
De este término destacar
que, si bien desde el siglo XVIII ya existía en la mayoría de los idiomas
europeos, no era así en España ni en la mayor parte de Hispanoamérica, siendo
un extranjerismo recogido por la Real Academia Española (RAE)
en 1995, a instancias de una de las academias de la Asociación de
Academias de la Lengua Española (ASALE). (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario