(Continuación) Y tras las jurídica y de carácter recreativo, pasamos a la siguiente categoría dentro de la herencia bibliográfica alfonsina, me refiero a las obras de carácter histórico, entre las que figuran dos títulos fundamentales: Estoria de España y General estoria.
Obras históricas
Estoria de España, conocida en la edición de Menéndez Pidal como Primera Crónica General, elaborada con
la pretensiosa ambición de narrar la historia de España desde un punto de vista
unificador, en términos nacionales y políticos.
Es
la primera narración de la que se tiene noticia que arranque con los primitivos
pobladores de la Península Ibérica, toda una alfonsina declaración de
intenciones. En ella el monarca elogia a sus gentes y tierras, señalando que es
“afincada en estudio”, es decir, esforzada y constante en la búsqueda del
conocimiento.
Idea que colisiona de manera frontal con la extendida, durante mucho tiempo, falta de tradición científica en España en esa época. Ya vemos que no fue así.
Y
Grande e general estoria o General estoria, escrita a partir de
1270 junto a la anterior, una propuesta de historia universal en castellano,
cuya finalidad no era otra que la de relatar la historia de la humanidad desde
su origen hasta el propio Alfonso X. Otra que tal cual, ya le dije que era hombre ambicioso.
Como
bien nos indica en el propio prólogo de la obra: “natural cosa” es querer saber
los hombres, los hechos que sucedieron en todos los tiempos. Pues eso.
Obras poético-musicales
Otra
importante faceta de su actividad cultural fue la creación poética -se le atribuye
también, siendo todavía infante, la traducción (1251) de los cuentos indios de Calila
y Dimna-, destacando sobre todo en la vertiente religiosa, donde alcanza
sus mayores logros con las Cantigas de Santa María (1250).
Un conjunto de 417 canciones en galaico-portugués, dedicadas a enaltecer los milagros marianos, e inspiradas en la misma Virgen de los Reyes, patrona de Sevilla y de las que el cosmopolita rey es supuesto autor.
Supuesto
porque, si bien es cierto que en opinión de no pocos entendidos, estamos ante una
de las colecciones con notación musical más importante de la literatura
medieval occidental, y sin duda uno de los más preciados legados de musicalidad
y variedad métricas sobre el que se cierne una sombra.
No
lo es menos que, en la actualidad, existen dudas más que razonables sobre el
hecho de que todas las piezas puedan tener, realmente, la autoría del rey
compositor. Algo que es muy probable nunca se podrá llegar a esclarecer, por lo
que lo dejo aquí. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
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