(Continuación) A comienzos de la segunda mitad del siglo pasado, en 1951, en el estado de California se prohibió tirar las neveras viejas en cualquier lugar que estuviese al alcance de los niños por el peligro evidente. Y un par de años después, a dicha prohibición, se añadía una cláusula que obligaba a los usuarios a retirar las puertas de los frigoríficos antes de deshacerse de ellos, a fin de evitar que alguien quedase encerrado en su interior.
Sin embargo y a pesar de las advertencias, el número de niños, más o menos traviesos, que quedaban atrapados en los frigoríficos con un desenclace en muchos casos fatal, no disminuyó. Se estima que solo en Estados Unidos, unos cincuenta niños morían asfixiados cada año en uno de estos electrodomésticos abandonados. Razón por la que los gobernantes decidieron dar un paso más y tomar medidas legales.
‘Refrigerator Safety Act’. Disposiciones legales
En agosto de 1956, Estados Unidos aprobaba a nivel nacional la Ley de Seguridad de los Frigoríficos, que contemplaba la implantación de mecanismos que permitiesen, a cualquier niño que quedase encerrado, abrirlos de manera fácil y sin realizar demasiada fuerza. Se idearon diferentes métodos y al final triunfó la patente que actualmente se comercializa y que fue diseñada por la empresa General Electric.
En el desarrollo de los nuevos modelos se
realizaron pruebas reales con niños, con el objetivo de medir la fuerza con la que
eran capaces de empujar una puerta desde el interior de un espacio cerrado y
reducido. Ni que decir que para ellos era un nuevo motivo de juego al que se
prestaban gustosos. Dado que era prioritaria su incorporación a todos los
frigoríficos del mundo, la patente del invento de la puerta magnética quedó
desbloqueada desde el primer momento, para que pudiera ser utilizado por el
resto de fabricantes.
Así surgió el antecedente de la que tiene en el
frigorífico de su casa, como un invento a prueba de escondites infantiles, pero
la cosa no quedó ahí. En dicha disposición también quedaba fijada una fecha
tope, 31 de octubre de 1958, para que los fabricantes estadounidenses dejaran
de vender frigoríficos con el cierre de manilla mecánico. Una
prohibición para comercializar los modelos antiguos por la que podrían ser
sancionados con multas de hasta medio millón de dólares (500 000 $). Cosa
seria.
Cierre magnético vs cierre de manilla
Y que resultó ser todo un acierto. Los datos estadísticos demostraron durante los años siguientes que el cambio al cierre magnético hizo reducir a la mitad la media de personas que perdían la vida dentro de un frigorífico. Y como se puede imaginar, desde entonces, se estandarizó de manera gradual en todo el mundo el uso de puertas con cierre magnético en los frigoríficos. Sin embargo, siempre hay un pero en la cesta de manzanas de los inventos, persistía un problema.
El de las familias que ya disponían de uno de
manilla, y no podían económicamente cambiarlo, por lo que durante más de veinte
años (hasta bien mediados los 70) en muchos hogares siguió existiendo el viejo
modelo con las consecuencias que se imagina. En dicho periodo se contabilizaron
varios centenares de muertes de niños, tras quedar encerrados en ellos por accidente.
Ahora ya sabe porqué las puertas de los
frigoríficos tienen un cierre magnético. Por último, un par de cuestiones más:
una, ¿quién fue su inventor?; dos, ¿sabe que Albert Einstein (1879-1955),
el genio germano-estadounidense de la teoría de la relatividad, inventó
un frigorífico a mediados de los años veinte?
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
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