La que ve de color azul en la ilustración es la única fuerza necesaria que, actuando sobre un cuerpo, hace que éste describa una trayectoria circunferencial.
Una interacción en la que la dirección de desplazamiento del cuerpo y la dirección de la fuerza actuante son perpendiculares.
En este caso la interacción es de naturaleza gravitatoria, que actúa a distancia y apunta hacia el centro de los cuerpos, carácter atractivo. De ahí que su efecto sólo suponga una variación en la dirección del cuerpo que se mueve y, la razón de su nombre, fuerza centrípeta.
La imagen bien puede ser la de nuestro satélite natural, la Luna, orbitando a casi cuatrocientos mil kilómetros, obsérvese el valor del periodo, pero la explicación serviría para el giro de cualquier otro satélite.
Por ejemplo el artificial satélite Meteosat, que lo hace a una distancia bastante, bastante, menor.
Les dejo con él para que piensen sobre ello. Quedo a su disposición.
Tiene que haber una fuerza centrífuga, porque si no se caería. Eso lo sabe cualquier alumno de ESO.
ResponderEliminarY dicen que es usted profesor...
Te aconsejo que tengas en cuenta desde qué sistema referencial estás hablando ¿inercial o no inercial?
ResponderEliminarVoy a intentar contestar a ese Anónimo que pone en tela de juicio tu profesión, que es la mia, y eso sí que no lo consiento, justo hoy que es el día del docente.
ResponderEliminarAnónimo:
La fuerza centrífuga es una fuerza ficticia, en realidad no existe. Y te voy a poner dos ejemplos:
1º: Vas montado en el coche de una noria, y la noria para de repente... ¿hacia dónde te ves impulsado? hacia la parte delantera del coche ¿a que sí? ¡¡¡no hay ninguna fuerza que te empuje!!!
Para ralentizar, la fuerza de frenada actúa tirando hacia atrás del coche, lo cual da como resultado una aceleración negativa (o deceleración). El cinturón de seguridad y la fricción del asiento harán que tu te ralentices al mismo tiempo.
Tú estás recibiendo dos informaciones diferentes: una fuerza que tira hacia atrás (la deceleración del coche), y tu impulso hacia delante. Son dos fuerzas iguales pero de sentido contrario.
Esa “fuerza ficticia” hace que sientas que te ves lanzado hacia delante, cuando realmente estás siendo arrastrado hacia atrás.
2º: Estás parado en un semáforo en rojo, de repente se pone verde y tú como es lógico aceleras... ¿qué sientes? una fuerza que te impulsa contra el respaldo del asiento ¿verdad?. Pero sin embargo el asiento lo que está haciendo es lo contrario, lanzándote hacia delante, aunque tú te resistas. Luego ya tenemos dos fuerzas iguales con sentido contrario: el asiento del coche ejerce una fuerza hacia delante sobre ti, mientras que tu ejerces una fuerza igual pero opuesta (hacia atrás) sobre el asiento.
Y ya que hemos salido del semáforo, piensa lo que pasaría cuando vas en carretera y tomas una curva a la izquierda...¿Hacia dónde te impulsa el coche? ¿qué fuerzas podríamos diferenciar en ese momento?
Posdata: Nunca pongas en duda las palabras de alguien que sabe más que tú, y recuerda un proverbio que dice: "El ignorante a todos reprende y habla más de lo que menos entiende".
Gracias Lourdes. Lo mismo estás para un roto que para un descosido.
ResponderEliminarBesos.
Carlos Roque Sánchez
Carlos, si hay algo que no puedo soportar es que alguien ponga en duda el trabajo de una persona que se preocupa de poner su tiempo y su sabiduría al servicio de los demás.
ResponderEliminarSi yo he aprendido muchas cosas de ti, leyendo tus entradas, todas las personas que entren a tu blog también aprenden. Asi que no se puede tolerar que tu profesión quede en entredicho.
Y ya de paso le he explicado a esa persona que existe la inercia.
Por cierto, que hace tiempo salía un anuncio en TV donde un chico iba en un monopatín lanzado, y en un determinado momento el profesor le decía que se bajase, pero el monopatín seguía aún unos metros. El profesor explicaba que eso era debido a la inercia que hace que un cuerpo permanezca en movimiento (o en reposo) si no hay ninguna fuerza que actúe sobre él. Por cierto, 1ª Ley de Newton.
Besos.
Lourdes.