lunes, 1 de abril de 2013

¿Por qué se dice ‘de Pascuas a Ramos’?


Dado que esas Pascuas hacen referencia a la de Resurrección o Domingo de Resurrección, es decir ayer y Ramos al anterior, al Domingo de Ramos que, como es bien sabido, son las festividades que dan final y comienzo, respectivamente, a la Semana Santa, resulta evidente que se trata de una expresión cuyo origen hay que buscarlo en nuestro mundo cristiano.

En la celebración de la Pascua de Resurrección o Florida, que tiene lugar una semana después del Domingo de Ramos por lo que, entre ambas celebraciones, transcurren cincuenta y una (51) semanas, es decir, casi un año.

Lo que es bastante tiempo para el hombre.


De ahí su uso a modo de locución adverbial, para indicar que algo sucede de tarde en tarde, o que ha de transcurrir mucho tiempo para que vuelva a suceder. Por eso decimos que nos vemos ‘de pascuas a ramos’, cuando lo hacemos con poca frecuencia.

Que es otra forma de expresarlo, ahora en términos más científicos, ya que hacemos referencia a un fenómeno físico de bajos valores de frecuencia (f) o, si queremos, altos valores de periodo (T).

Recordemos que son dos magnitudes físicas, frecuencia y periodo, asociadas a los movimientos periódicos, aquellos cuyas magnitudes características se repiten a intervalos regulares de tiempo.

Movimientos de baja frecuencia como los que experimenta la Tierra en su viaje alrededor del Sol (un año) o la Luna en su viaje alrededor de la Tierra (27,7 días); de frecuencia intermedia como los que experimentan la Tierra en su rotación sobre sí misma (un día), las manecillas de un reloj o un péndulo; y de mayor frecuencia como los latidos de su corazón, la corriente eléctrica alterna de nuestras casas o el émbolo de un motor de explosión. Entre otros muchos.

Porque no son pocos los cuerpos que, en la naturaleza, llevan un movimiento periódico y todos ellos con algo en común.

Lo realizan describiendo siempre la misma trayectoria (abierta o cerrada), reproduciendo las magnitudes características de su movimiento (posición, velocidad, aceleración, fuerza, energía, etcétera) y haciéndolo siempre en el mismo orden.

‘De pascuas a ramos’ es algo parecido al modismo “de higos a brevas”, que seguro también le suena. Sabido es que la higuera primero da brevas y, acabadas éstas, después de un largo tiempo, da higos.

Pero bueno, demos tiempo al tiempo. Acabamos de estrenar la primavera y las higueras, como las bicicletas, son para el verano, así que tiempo habrá.

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