viernes, 9 de marzo de 2012

Lisístrata y el Día de la mujer

Les decía que la idea no era nueva ni por asomo.
Echando las cuentas, desde 1977, la celebración tiene sólo treinta y cinco (35) años. Pero hay antecedentes literarios que se remontan cuatro siglos antes de Cristo.

En la antigua Grecia, dónde si no. Está visto que tendremos que beber siempre de los clásicos.

Nos llega de la mano del dramaturgo griego Aristófanes (444 aC-385 aC) y, en concreto, de una de sus obras principales, Lisístrata, representada por primera vez en 411 a C. 

Así que el año pasado se cumplieron veinticinco (25) siglos. Que se dice pronto.

Y sin embargo ahí está. Como si no hubiera pasado el tiempo por ella. 

Su temática sigue de plena actualidad. Pero es lo que tienen los clásicos. Que nunca pasan. 


Lisístrata, una obra que se ha convertido en un símbolo del esfuerzo organizado y pacífico a favor de la paz. Un esfuerzo, eso sí, algo peculiar.

Peculiar porque en esta obra, las mujeres griegas, con la ateniense Lisístrata al frente, se negaron a mantener relaciones sexuales con sus maridos, si no deponían las armas. Qué me dicen. 
Una huelga sexual contra los hombres para poner fin a la guerra. Lo que no sepan las mujeres. 
Y para acabar con este antecedente literario, dos curiosidaddes. Lisístrata significa en griego "la que disuelve el ejército". Y ya de la que va les diré que, en honor a Aristofánes, se bautizó al asteroide 2934 con su nombre. 
Aristófanes, el asteroide, fue descubierto por los astrónomos Cornelis Johannes van Houten, Ingrid van Houten-Groeneveld y Tom Gehrels desde el observatorio de Monte Palomar (Estados Unidos), el 25 de septiembre de 1960. (Continuará)


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