(Continuación) En otro orden de asuntos un par de detalles que han llamado mi atención. Uno. Como seguro sabe la isla de Groenlandia es la más grande del mundo, se encuentra en la región ártica entre los océanos Ártico y Atlántico Norte, al noreste de Canadá y noroeste de Islandia, y es un territorio autónomo perteneciente al Reino de Dinamarca, formado además por las Islas Feroe y Dinamarca.
Y un poco más
Un reino que, gracias a la isla, ocupa una ubicación
central como estado costero en el Ártico. Ni que decir tiene que las
autoridades groenlandesas y danesas han afirmado públicamente su derecho a la
autodeterminación y han declarado que “no está en venta”. A qué dudar que Groenlandia
es mucho más que una gigantesca isla helada, allá en lo alto, vigilando el Polo
Norte.
Dos. Tampoco ignora que EE. UU. en su corta vida como país, va camino de cumplir su ducentésimo quincuagésimo (250.º) aniversario, tiene ya una larga historia de adquisición de territorios mediante toda clase de métodos: compras, tratados o anexiones.
Sin entrar en detalles y por paralelismo con ésta que nos trae, recordar la compra de Alaska en 1867 a Rusia por la cantidad de siete coma dos millones de dólares (unos ciento veinte millones actuales), a menos de dos centavos por acre.
Más de medio millón de 586.412 millas cuadradas, (España
no llega por poco a las doscientas mil) que en 1959 se convirtieron en el
estado número cuarenta y nueve (49) de los cincuenta que hay desde entonces.
Nueva propuesta de mapamundi
Sin duda se trata de una cuestión de poder y percepción -vuelvo a la impresentable deformación geográfica “mercatoriana” que no solo tergiversa el tamaño de África pues también lo hace con todo el hemisferio sur del planeta- motivos por los que, en todo y por mucho, esta situación debe de cambiar.
No olvidemos que las sociedades humanas producen
historia y ésta, no pocas veces, pueden fabricar geografía que es como, durante
siglos, las distorsiones polares de Mercator han reforzado, y refuerzan
aún, la visión eurocéntrica del mundo aumentando así el poderío de las tierras
septentrionales.
De ahí que la africana campaña Corrige el mapa
proponga una nueva proyección pseudo cilíndrica para el planeta, la Equal
Earth, creada en 2018 a partir de la proyección de Robinson de 1961 y
que, a diferencias de otras que las distorsionan, ella sí conserva el tamaño
relativo de las áreas en un mapa mundial. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.




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