[Esta entrada apareció publicada el 12 de julio de 2024, en el semanario Viva Rota, donde también la pueden leer]
(Continuación) Por cierto, no le dije que la neurociencia es un área interdisciplinaria que estudia cómo se desarrolla el sistema nervioso, su estructura y funcionamiento; los neurocientíficos se centran, además de en el cerebro, su impacto en el comportamiento y las funciones cognitivas (pensamiento), en investigar qué sucede en él cuando las personas tienen trastornos neurológicos, psiquiátricos o del neurodesarrollo.
Pero volviendo a
nuestro balón no quedan aquí las utilidades de la tecnología ‘Connected
Ball’ de la que va provisto pues con ella podemos saber, entre otros
parámetros científicos importantes en el fútbol: la velocidad con la que sale
del pie de un futbolista, el giro que cada jugador le imprime o el ángulo de
lanzamiento que emplea.
Ni que decirle tengo que con dichos datos: los entrenadores sabrán qué jugadores del equipo son los idóneos para lanzar las faltas, en qué posición deben jugar cada uno o durante cuánto tiempo, y los árbitros están llevando sus decisiones a un nuevo nivel.
Desde el campo de la bioquímica
sepa que este balón Fussballliebe está fabricado con materiales
químicos respetuosos con el ambiente, poliéster (tipo de resina plástica que se obtiene del
petróleo), reciclado y tinta a base de agua que se disuelve con
el riego evitando así que los residuos del balón queden en el campo.
Pero también, en su
desarrollo, se han empleado materiales biológicos como la fibra de maíz,
la caña de azúcar o la pulpa de madera que ofrecen la ventaja de ser
degradados por los microorganismos del suelo, impidiendo su acumulación en el
césped. Un balón, como se dice ahora, ambientalmente sostenible.
De la bioquímica sólo apuntar que es otra ciencia interdisciplinar, combinación de química y biología, encargada de estudiar la composición de los seres vivos y los procesos químicos que ocurren en estos, posibilitando que lleven a cabo sus funciones biológicas.
De su diseño técnico
resaltar que la estructura de 20 paneles y las ranuras de relieve estratégicamente colocadas en la carcasa
exterior mejoran la aerodinámica al controlar el flujo de aire sobre ella,
aumentando así la precisión en los lanzamientos y la estabilidad del vuelo.
Y con su diseño
estético se pretende representar el movimiento del balón y la energía puesta
en juego durante un partido, empleando para ello siluetas negras en forma de
alas acentuadas con trazos, curvas y puntos de colores
como rojo, azul, verde y naranja que celebran tanto la vitalidad de las
naciones competidoras como la simplicidad del fútbol para atraer a los
aficionados y el encuentro de culturas.
Van también personalizados con ilustraciones de cada uno de los estadio
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla
y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
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