‘Historia Natural de Plinio.’ [LR-174]

‘El bibliotecario del mundo’. Un voluminoso ensayo de 600 páginas agrupadas en tres partes -EL HOMBRE, LA HISTORIA NATURAL Y LAS HUELLAS DEL HOMBRE- en las que se recoge la vida y obra de quien escribió uno de los primeros grandes compendios enciclopedistas de Historia Natural que han existido en el mundo antiguo, pues data nada menos que del año 77.

Él, Plinio el Viejo (23-79) erudito, militar y científico, uno de los hombres más importantes de su tiempo que llegó a ocupar casi el cuarto lugar en el escalafón de los cargos imperiales durante el gobierno del emperador Vespasiano. Y al que su sentido del deber primero y su insaciable curiosidad después, le llevaron a dirigir una flota de rescate durante la erupción del Vesubio, muriendo en la playa de Estabia, muy cerca de Nápoles y Herculano, al intentar averiguar el origen de la famosa erupción.

Ella, ‘Historia Natural’, es una compilación de todo el saber de su época, fundamental para entender no sólo lo que pensaban los romanos sobre la Naturaleza y sus fenómenos, sino como explicaban el funcionamiento del mundo y cómo explotaban sus recursos. Y cuando le digo el mundo es porque Plinio se interesa por (casi) todo: desde las constelaciones de estrellas hasta los insectos, pasando por la inteligencia de los pulpos y el significado de los fósiles de reptiles y dinosaurios. Nada le era ajeno.

Sirvan de ejemplo de esto que digo, la admiración que muestra por cometas y asteroides, o por la demostración de que la Tierra es esférica, y las preguntas que e formula acerca de por qué los cetáceos se quedaban varados en las playas, por el origen del ámbar o por las propiedades de la magnetita. Unos conocimientos de los que la sociedad actual es en muchos casos deudora, dos mil años después, como ocurre con el uso médico de la mostaza que acabó derivando en el pasado siglo XX, primero, en la creación del gas mostaza, utilizado por vez primera en las trincheras de la Primera Guerra Mundial, y después en los primeros tratamientos de quimioterapia.

Igualmente, Plinio nos muestra el secretismo con que ya en aquella época, se llevaba a cabo el comercio de algunos productos de lujo como el incienso o la mirra, fundamentales para la perfumería y la alta cosmética, casi, casi como en la actualidad, otra muestra de la enorme vigencia de su legado. Y también nos cuenta “quisicosas” del mundo romano, como esa especie de listado de fenómenos curiosos: quién fue la mujer que más hijos dio a luz, quién era el hombre más fuerte o quién el más alto.

Al que acompañan infinidad de remedios curativos de su tiempo, de los más lógicos a los más extravagantes, como el que recomendaba a las mujeres llevar encima un salmonete para evitar los dolores menstruales. Pero no se equivoque, a pesar del tiempo transcurrido y ciertas “ocurrencias”, ‘Historia Natural’ sigue gozando de una pasmosa actualidad, al mostrarnos a un Plinio que se pregunta dónde nos conduce la explotación indiscriminada de nuestro planeta. Recuerde.

TÍTULO: Historia Natural de Plinio. El bibliotecario del mundo.

AUTOR: López Silva, Xosé Antonio

EDITORIAL: Guadalmazán, 2022.