martes, 11 de abril de 2023

Centenario de Einstein en España, 1923. Recepción Real y nueva conferencia

(Continuación) Las calles y la plaza del mercado, vista de la ciudad, el Tajo con algunos puentes de piedra; cuestas de piedra, agradables planicies, catedral, sinagoga. Puesta de sol con resplandecientes colores en nuestro regreso.

Un pequeño jardín con una vista cerca de la sinagoga. Una magnífica pintura de El Greco en una pequeña iglesia (entierro de un noble), entre las cosas más productivas que vi. Un día maravilloso.”

Miércoles, 7 de marzo: Recepción Real y 3º conferencia

A mediodía el matrimonio Einstein, acompañado de José Rodríguez Carracido, fue recibido en el Palacio Real por el rey Alfonso XIII y la reina María Cristina. En su diario, el sabio anotó que la reina estaba, relativamente, al tanto de la ciencia y que el rey se mostraba “sencillo y compuesto. Le admiré como tal”.

Por la tarde, de nuevo en la Facultad de Ciencias de la Universidad Central, dio su tercera conferencia, ésta sobre los problemas actuales de la relatividad, y a pesar de que se había advertido que en ella se tratarían temas de profundidad físico-matemáticas, fue enorme el gentío que asistió a la misma.

Se piensa que quizás fue la que más agradó a Einstein por el alto nivel que demostraron sus interlocutores, entre ellos el ingeniero Emilio Herrera (1879-1967) que, no solo moderó la sesión como vicepresidente sino que, a la vez, intervino como un participante más.

Antirrelativismo y Palacios

Y por supuesto, como ocurrió en Barcelona con J. Comas Solá (1868-1937), también hubo su ración de antirrelativismo, que en este caso corrió a cargo del físico panicense Julio Palacios (1891-1937), profesor de la universidad y el más destacado entre los disconformes.

Heterodoxo con todo lo concerniente a las cuestiones relativistas, fue la suya una postura científica que, en opinión de no pocos estudiosos, si bien no llegó a oscurecer su carrera científica, al menos sí ayudó a ensombrecerla.

No cabe la menor duda de que a comienzos de la década de los años veinte del siglo pasado, los físico y matemáticos españoles estaban familiarizados con los problemas relacionados con ambas teorías, la de la Relatividad Especial (TRE) y la de la Relatividad General (TRG), aunque no todos estuvieran de acuerdo con ellas.

De hecho el mismo Einstein, mientras estuvo en Madrid y años más tarde repetiría, afirmó que el panorama científico español estaba cambiando de manera esperanzadora; en especial solía recordar a Esteve Terradas. El día 7 de marzo se cerró con una recepción en la Embajada de Alemania. (Continuará)

[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.

 

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