(Continuación) Del muelle
Que no puerto, donde se reparaban embarcaciones y se construían pequeñas barcas para uso fluvial, y que representa el principio y final de la aventura, el “alfa y omega” de una de las mayores empresas en toda la historia de la humanidad, pues terminó cambiando la faz del mundo.
No en vano de él partieron (1519) las cinco naves
comandadas por Magallanes volviendo solo una (1522), con Elcano
al frente y después de haber circunnavegado por primera vez al planeta.
Como quien dice una vuelta a la misma margen y en el
mismo muelle del río, y de la que sin duda nuestro marino es el “omega”
de la misma. Una expedición que comenzó como contramaestre de
la nave Concepción y terminó encabezándola desde la Victoria,
tras la muerte del navegante portugués Fernando de Magallanes (1480-1521),
Capitán General de la Armada de la Especiería, ya se lo imagina, el “alfa”
de la hazaña.
De Juan Sebastián Elcano (1476-1526) no es poco lo que se ha escrito y bien, por lo que sólo sobrevolaré su figura histórica dando algunas pinceladas al sevillano modo. Una, ya trazada a lo largo de más de una entrada de esta serie, versa sobre la variedad de formas en la que su apellido aparece transcrito: de Elcano, del Cano, de El Cano, el Cano o Elcano.
Una cuestión menor si se quiere, sobre
la que existen varias hipótesis siendo la más aceptada que él o su familia
paterna fuera oriunda de Elcano, un lugar cercano a Guetaria; lo que podría
ser. Pero también está la cuestión de su firma, conservada en diversos
documentos, donde podemos ver que usa la forma del Cano, lo que lleva a
nuevas interpretaciones.
No obstante, existe cierto consenso
lingüístico en considerar que tanto ésa como otras, Del Cano o de El
Cano, no serían más que errores de transcripción del apellido gentilicio
original, al añadirle la preposición “de”, usual en aquella época, y
confundirlo con el más habitual Cano; lo que podría ser también.
La buena
suerte de Juan Sebastián Elcano
No tan menor como la cuestión del apellido, fue la serie de circunstancias que jugaron a su favor a lo largo de toda la travesía e hicieron de él quien fue, el hombre que llevó a cabo la primera vuelta al mundo; uno de los objetivos conseguidos, aunque nunca pretendido.
A fin de no cansar o molestar, ya sabe que pasa por ser el undécimo
mandamiento, le pongo negro sobre blanco una manita de estas circunstancias
suertudas, expuestas más o menos por orden cronológico de aparición.
(Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva,
si desean ampliar información sobre ellas.
[**] El original de esta entrada fue
publicado el 17 de octubre de 2022, en la sección DE CIENCIA POR SEVILLA,
del diario digital Sevilla Actualidad.
ÍNDICE
¿Dónde está el Índice con las entradas publicadas? Le felicito por la idea.
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