(Continuación) Durante el verano hace más calor porque estamos más cerca del Sol, es decir próximo al perihelio, y durante el invierno más frío porque estamos más lejos del Sol, o sea próximo al afelio. Es ciencia popular, lógica hasta cierto punto, pero equivocada por ser científicamente errónea.
Equivocada de toda equivocación porque en realidad sucede todo lo contrario, en invierno estamos más cerca del Sol y sin embargo sentimos frío, mientras que durante el verano estamos más lejos y sin embargo sentimos calor.
Y es que la verdadera causa de la existencia de las
estaciones se encuentra en la combinación de tres factores: el movimiento de
traslación, el movimiento de rotación y la inclinación de 23,5 º
del eje de giro del planeta, prácticamente constante a lo largo de un año, con
respecto a la perpendicular a la órbita elíptica plana.
Si no existiera esa inclinación y el eje de giro fuera perpendicular a la órbita elíptica plana no existirían las estaciones, ya lo hemos enrocado en alguna que otra ocasión.
Observación nocturna invernal del cielo: satélite y planetas
En general, para cualquier estación y época del año,
a la hora de mirar algún fenómeno astronómico de interés, sea predicho (como
los eclipses) o no (como los cometas nuevos), aparte de hacerlo
con las precauciones adecuadas es preferible, por razones obvias, llevarlas a cabo
en fechas cercanas a la luna nueva o novilunio, un fenómeno
celeste que tendrá lugar los próximos 2 de enero, 1 de febrero y 2 de marzo del
2022.
En estas fechas digo, salvo que sea la propia Luna
lo que pretendamos observar, claro. En este caso lo haremos en luna llena
o plenilunio, de la que tendremos la primera de esta estación invernal el
18 de enero de 2022, dándose las siguientes 29 o 30 días después como ocurre
con todas, es decir el 16 de febrero y 18 de marzo de 2022.
En lo que respecta a los planetas solares y su visibilidad, durante esta estación, el cielo al amanecer estará dominado por Marte, al que se unirán: Venus a mediados de enero, Mercurio durante el todo el mes de febrero y Saturno al finalizar febrero
Del mismo modo los cielos del anochecer
comenzarán con estos cuatro planetas visibles: Mercurio, Venus, Saturno
y Júpiter, que irán desapareciendo de manera paulatina. Venus a primeros
de enero, Mercurio y Saturno a mediados del mismo mes y Júpiter a mediados de
febrero, dejando el final del invierno sin planetas visibles al anochecer.
Observación nocturna invernal del cielo: eclipse, lluvia de meteoros y
constelaciones
Durante este invierno no se producirá ningún eclipse,
pero sí tendremos, cómo no, lluvias de meteoros que podremos ver sin
necesidad de telescopios. La primera y más importante del invierno es la
de las Cuadrántidas, cuyo máximo se dará hacia el 3 de enero. (Continuará)
[*] Introduzcan en [Buscar en el blog] las palabras en negrilla y cursiva, si desean ampliar información sobre ellas.
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