(Continuación) Y a nivel nacional perderían su empleo sesenta mil (60 000) trabajadores. Piensen que no sólo están los
que cultivan el tabaco, existe toda una cadena de puestos de trabajo tras ellos:
estancos, distribución, máquinas expendedoras, empresas tabaqueras, etcétera.
Lo que se dice, lo que va desde la semilla hasta el cenicero.
Por supuesto que también está el Estado. Nada menos nueve mil millones de euros (9 000 000 000
€) al año dejarían de recaudarse en impuestos derivados del sector del tabaco.
Estamos hablando del cinco por ciento (5 %) de la recaudación en impuestos, o
del cero coma nueve por ciento (0,9 %) del producto interior bruto (PIB).Un buen susto para la hucha de “papá estado”. O quizás no.
El
cuento de la buena pipa
Lo que sí es seguro es que si se piensa un momento, estamos ante toda una paradoja estatal. Resulta que de un lado
recaudamos impuestos de una actividad que, al menos oficialmente, por otro lado
nos esforzamos en combatir ¿En qué quedamos entonces?
Y sobre todo, ¿qué hacemos? ¿Lo prohibimos del todo y a las claras o
recaudamos a saco? Todo un dilema para lo políticamente correcto y lo dejo ahí.
En mi opinión, por si les interesa conocerla, este asunto me suena como el
cuento de la buena pipa, que seguro conocen:
- ¿Quieres que te cuente el cuento de la buena pipa? - Sí.
- Yo no digo ni que sí ni que no. Sino que si quieres que te cuente el
cuento de la buena pipa. - No.
- Yo no digo ni que no ni que sí. Sino que si quieres que te cuente el
cuento de la buena pipa. - Sí.
- Yo no digo ni que...
Y así, ad aeternum como cuando
era un niño, o ad nauseam ahora que
soy mayor.
Pero para no dejarles con una mala impresión acerca de esta entrada
relacionada con el cigarrillo y, de alguna manera, con Sevilla desde donde
normalmente les escribo (¿Quién inventó el cigarrillo?), me vienen a la memoria
algunas escritas a lo largo de más de cinco años.
Como ¿Qué tiene que ver el color rojo y los labios? o ¿Por qué las mujeresse pintan los labios de rojos?
En alguna de ellas aparece la expresión Russian
Red que, aparte de ser una tonalidad roja de un lápiz de labios comercial,
es también el nombre artístico de una cantante española que, a su vez, canta
una canción titulada Cigarrette. Qué
cosas.
Cigarrette de Russian Red
Ella es una cantante española (1985) de música indie, folk y pop, y la
canción pertenece a su álbum I love your
glasses (2008) editado por el sello Eureka.
Lo cierto es que no puedo vincular ni el nombre del álbum, ni el de la
canción, ni el contenido de la letra, con algún aspecto de la ciencia salvo, si
acaso y forzando mucho, con el nombre del sello discográfico, todo un icono de
referencia científica.
De la letra les dejo estos renglones:
Porque
estoy perdiendo el tiempo, / estoy tirando el dinero de nuevo, / y todos
los cigarrillos que nunca he fumado,
/ y todas las cartas que nunca he
enviado. / Estoy
perdiendo el tiempo...
Sí. Me gusta Rojo ruso y me encantan sus gafas, pero ya
estoy perdiendo el tiempo ¡Eureka! ¡Eureka!
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