Del tatuaje, su borrado y la Ciencia

Relacionado con lo escrito sobre sobre el significado del tatuaje, me llegó al poco esta pregunta: ¿Es segura la técnica láser para el borrado de los tatuajes? Vayamos por parte.

Por lo general los tatuajes suelen ser frases, dibujos, nombres o fechas que recuerdan algún momento especial en las vidas de las personas. De ahí que algunas quieran “inmortalizarlo” en su piel. Nada objetar.

Pero, siempre suele haber uno, también por lo general, la vida suele ser larga y al final resulta que hay en ella tiempo para todo. Por ejemplo, para arrepentirse de algunas decisiones tomadas, como la de hacerse cierto tatuaje en alguna parte de nuestro cuerpo.

Es cuando decidimos borrarnos el tatuaje. Y las causas son varias.

Desde por la aparición de reacciones alérgicas al tatuaje, tanto de forma inmediata como con el paso del tiempo, ya que el tatuado puede hacerse alérgico muchos años después. Una problemática muy poco frecuente y que se suele tratar con corticoides.

Hasta por la dificultad que les pueda llegar a representar, a la hora de obtener un puesto laboral. Por ejemplo, está constatado que para entrar en las Fuerzas Armadas o para poder trabajar en algunas grandes superficies, un tatuaje visible se puede convertir en un obstáculo. Así están las cosas.

En cualquiera de los casos, por un motivo u otro, se trata de tatuajes con fecha de caducidad.

Creo que no existen cifras oficiales, ustedes me corregirán si no es así, pero se estima que un veinticinco por ciento (25 %), es decir, uno de cada cuatro españoles de edades comprendidas entre los diecinueve (19) y los veintinueve (29) años lleva algún tatuaje.

Y de ellos, un sesenta por ciento (60%), a los cinco (5) años ya está arrepentido de habérselo hecho. Ya les hablé de fecha de caducidad. No en vano, en los dos (2) últimos años, este tipo de consulta dermatológica ha aumentado en un treinta por ciento (30%). Y eso que estamos en crisis.

Efecto Melanie

Y aunque ya hemos visto que las razones para el borrado tatuajero pueden ser varias, una de las más llamativas sin duda es el desamor. Tanto, que incluso se ha llegado a poner un nombre a este fenómeno social. Se le conoce como 'efecto Melanie'. El motivo ya se lo imagina.

La actriz, quien al inicio de su relación sentimental con Antonio Banderas en 1995, se tatuó su nombre dentro de un corazón, tras el divorcio (2014) lo tuvo claro. Si no hay amor en el corazón, tampoco adiós tatuaje con nombre y corazón.

Pero todo necesita de su tiempo y por ello, la Griffith, tuvo que optar en un principio, por una buena capa de maquillaje para disimularlo. Después, algunas (3) sesiones con láser, lo han eliminado definitivamente de la piel de su brazo derecho.

Esa es la suerte que ha corrido el tatuaje del corazón y el nombre en su brazo. No les puedo decir cuál ha sido la del hombre en su corazón. Al fin y al cabo, qué sabe nadie de nadie, en lo que concierne a las cosas del querer.

De lo que sí se algo es de la ciencia que se esconde tras el borrado con láser de un tatuaje.

La ciencia del borrado del láser

Una de las técnicas más conocidas y reconocidas lleva el nombre de Láser Q-Switched que, por lo que he podido consultar, es la que más publicaciones y evidencias científicas tiene a su favor.

Se trata de un equipo que trabaja en la región del espectro electromagnético conocida como zona infrarroja (IR) y emite radiaciones de longitudes de onda (λ) de diferentes valores. Por ejemplo de λ= 1064 nm, para pigmentos oscuros como azul y negro y de λ=532 nm, para naranjas, amarillos y lilas.

Por hoy, este láser es la mejor opción para la eliminación de tatuajes de todos los colores, incluidos los oscuros, y con un mínimo de complicaciones.

Y su funcionamiento es, relativamente, simple. Lo hace emitiendo hasta diez disparos por segundo, de alto valor energético pero de poca duración, para una zona de unos tres o cuatro milímetros cuadrados (3-4 mm2) de superficie.

Dicho haz de luz es absorbido de forma selectiva por las partículas de tinta que, debido a ese aporte energético, estallan fragmentándose en otras más pequeñas sin dañar los tejidos colindantes, y terminan por ser eliminadas de forma natural por el propio organismo, tanto por la vía linfática como a través de la piel.

A este proceso se le conoce como efecto fotoacústico y es, por ahora, la forma mejor y más rápida de acabar con un tatuaje. No obstante, no hay garantía de un borrado al cien por cien.

Sucede que los resultados finales del mismo, dependen de varios factores. Es lo podríamos llamar la Técnica del borrado del tatuaje.