Climático o meteorológico, ¿cuándo decir uno u otro? (1)

Si quedamos que tiempo y clima no son lo mismo, parece preclaro que no debemos emplear de forma indistinta, los adjetivos climático y meteorológico. Pero el caso es que se hace, y con no poca frecuencia, cuando hablamos del estado del tiempo ¿Cómo remediarlo?

Para poder responder de forma razonada a la pregunta, quizás convenga diferenciar entre estas dos ciencias: Meteorología y Climatología. Ambas acabadas en -logía lo que, ¿es significativo?

Meteorología

Es la ciencia del tiempo (meteorológico). La que trata de los fenómenos atmosféricos, es decir, de aquellos procesos que ocurren, a corto plazo, en las capas bajas de la atmósfera. Una región que como bien sabe, es donde se desarrolla buena parte de la vida de plantas y animales, en nuestro planeta.

La meteorología estudia los cambios atmosféricos que se producen a cada instante, utilizando para ello magnitudes físicas como la temperatura del aire, su humedad, la presión atmosférica, el viento o las precipitaciones.

Y sus objetivos no son otros que el de predecir el tiempo que va a hacer a corto plazo (en horas, en un día, 24 h, o en dos, 48 h), y el de elaborar un pronóstico del tiempo a medio plazo.

Pero de su estudio se obtiene una información que, también, puede tener otras aplicaciones prácticas.

Entre otras: la meteorología aeronáutica, especializada en todo lo que afecta al tráfico aéreo; la meteorología agraria, que está en la cosa ésta de predecir las condiciones adecuadas para las distintas labores agrícolas; o la meteorología médica, encargada de estudiar la influencia de los factores atmosféricos sobre la salud humana.

Para concretarles aún más, son las conocidas previsiones meteorológicas de los noticiarios televisivos y radiofónicos.

Por eso las personas, del tiempo, nos referimos a él como tiempo meteorológico y no como tiempo climático.

Climatología

Es la ciencia del clima, la que lo estudia a él y a sus variaciones a lo largo del tiempo. Analiza los distintos estados del tiempo y deduce su valor promedio para grandes periodos.

Por ejemplo, aunque en un desierto se pueda producir de forma eventual una tormenta con precipitación abundante, su clima sigue siendo desértico, ya que la probabilidad de que esto ocurra es muy baja.

Unos intervalos de tiempo no inferiores a treinta (30) años, si bien pueden llegar a ser más largos (mil años o más), en cuyo caso nos adentramos en el campo de la Paleoclimatología, que es la que se encarga del cambio climático.

La Climatología estudia la zonificación en los fenómenos atmosféricos de ahí que, desde este punto de vista, esté muy ligada a la Geografía Física, dándonos el clima de una región

Aunque esta ciencia suele utilizar los mismos parámetros que la meteorología, su objetivo es distinto: no pretende hacer previsiones inmediatas sino, estudiar las características climáticas a largo plazo.

De ahí que hablemos del cambio climático y no del cambio meteorológico. (Continuará)