No. No estoy de bromas.
Es posible abrir una botella de vino con tan sólo la ayuda de un zapato. Es verdad, al menos para empezar. Porque necesitará también de una pared y algo de técnica golpeadora.
Pero si los tiene, les aseguro que los resultados son de lo más satisfactorio. Máxime teniendo en cuenta lo delicado de la situación.
Seguro que se ha visto en ella. Una botella por abrir y no tener un abridor adecuado que nos permita hacerlo de forma fácil.
Bueno pues aquí tiene una alternativa.
Descorche zapatero
Aunque las imágenes son lo suficientemente elocuentes, el sentido común nos dicta sencillas reglas a tener en consideración.
Como la de sujetar la botella con firmeza, golpear de forma seca y poco a poco contra la pared, ser cuidadoso para no mancharla o deteriorarla con el zapato, etcétera.
Si lo hace así, verá como el tapón va saliendo hasta que puede sacarlo con la mano, a la vez que su pared queda intacta e inmaculada.
Lo que el sentido común no le dictará es el por qué sólo puede utilizar este método con las botellas cuyos tapones estén totalmente introducidos en ellas (como las de vino), y no con las que tengan parte del tapón fuera (como las del champán).
¿Es esto cierto? ¿Por qué?
Por supuesto que en este asunto, la respuesta no está en el viento como Dylan canta "The answer is blowin in the wind".En realidad (casi) ninguna respuesta está ahí, en tan natural y poético lugar. No. Más bien anda por lugares más prosaicos y humanos.
Ya saben que si nos preguntamos el porqué de las cosas, inevitablemente, acabaremos encontrándolo en la física. Como es el caso. Tanto el del tapón de vino como el del de champán.
Y dicho lo cual ¿Por qué se descorcha la botella de vino?
No hay comentarios:
Publicar un comentario