No obstante el error de Lowell tuvo consecuencias positivas. Es la segunda de las curiosidades que les traigo.
Gran parte de la iconografía popular de los marcianos, como prototipo de extraterrestres, proviene de los libros que, más arriba les comenté, escribió Lowell sobre los canales marcianos.
Sus títulos: Mars (1895), Mars and Its Canals (1906), y Mars As the Abode of Life (1908).
Sus títulos: Mars (1895), Mars and Its Canals (1906), y Mars As the Abode of Life (1908).
De hecho, en 1912, cuatro años después de que publicara sus teorías sobre la vida en Marte, el escritor estadounidense de género fantástico Edgar Rice Burroughs (1875-1950), comenzó una serie de novelas de ciencia-ficción, sobre algunos de los habitantes de Marte.
Entre ellos los archiconocidos marcianos verdes. Unos humanoides el doble de alto que cualquier humano, con seis extremidades, rostros monstruosos y un carácter de perros.
Del señor Burroughs es probable que le suene su nombre, no en vano es conocido por su creación del mundialmente famoso personaje Tarzán, el rey de la selva.
Es evidente que tendrá que aparecer, antes que después, por este negro sobre blanco bloguero. (Continuará)
A propósito de las citas que pone, debería ponerlas para que se vieran todas juntas.
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