Lamentablemente este desagradable efecto se produce siempre que utilicemos el flash aunque, eso sí, no en el mismo grado.Tres detalles a tener en cuenta, no de todos conocidos:
1) No es un fenómeno exclusivo de las digitales. Ya pasaban con las anteriores cámaras analógicas.
2) No es necesario que el fotografiado esté mirando directamente a cámara para que el indeseado reflejo se produzca.
3) Los ojos rojos se ven sólo desde donde está el flash. De modo que si nos iluminan desde la derecha con un flash, los que nos fotografien delante nuestro sin flash, no verán el resplandor rojizo en sus fotos.
¿Cómo evitarlo, entonces?
En primer lugar tomando unas sencillas medidas.La primera consiste en iluminar lo más posible el recinto, encendiendo para ello todas las luces posibles.
También se aconseja a los fotografiados que miren hacia una luz cualquiera de forma que se les contraigan las pupilas.
Hay fotógrafos que suelen disparar manualmente un flash, antes de tirar la foto. Con estas medidas se reduce la luz reflejada en los ojos y se minimiza el dicho efecto.
En la actualidad las cámaras digitales traen una función anti efecto ojos-rojos. Consiste en un sistema digital que dispara de forma automática un primer flash justo antes de que salte el segundo con la foto.
Al igual que si lo hacemos de forma manual, el primer disparo contrae la pupila disminuyendo la cantidad de luz que entra con el segundo.
¿Cómo quitarlos, si...
...Así y todo, nos salen los ojos rojos? Pues no se preocupe porque hay solución.Cada cámara suele venir provista de un programa que le ayudará a quitar el reflejo rojo.
Ademas hay en el mercado un buen número de programas informáticos que desde el ordenador le permien retocar las fotos hasta dejarla como a su gusto.
Perdonen que no les de nombres. No es por nada. Pero lo llaman publicidad.
Me queda aún una pregunta por responder: ¿Por qué nos ciega el flash?
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