lunes, 29 de septiembre de 2014

Tener una red wifi cercana no es perjudicial (1)


Con esta afirmación cerraba la anterior entrada y me basaba, en lo que al respecto nos dicen la ciencia, la lógica y los datos empíricos para la salud humana y en nuestros hogares.

La wifi no es perjudicial, y lo dice la ciencia
Paso ahora a argumentarlo y empezaré, claro, con la ciencia aunque, antes, quizás convenga recordar algo que nos enseñaron en los años bachilleres.

A nadie escapa que estamos rodeados de ondas, tanto mecánicas (sonido, cuerda vibrando, terremoto, etcétera) como electromagnéticas.

Unas transmisiones de energía estas últimas, que se realizan sin necesidad de ningún soporte material y que nos resultan familiares gracias a esa ilustración que conocemos como espectro de ondas electromagnéticas.

¿Qué es el espectro electromagnético?
No es más que el conjunto de todas estas ondas, clasificadas según sus valores de frecuencia (f). Unas ondas que viajan todas juntas a través del vacío (a la misma velocidad, c), aunque cada una está caracterizada por el valor de su frecuencia (f), longitud de onda (λ) y energía (E).

Un abanico de radiaciones que se muestra muy útil a la hora de explicar muchos fenómenos conocidos: desde el bronceado de la piel hasta nuestra visión o la escucha de sonidos, pasando por la radio, la televisión, wifi y, por supuesto, Internet.

Y dada la relación físico-matemática existente entre esas magnitudes, sabemos que a mayor frecuencia o menor longitud de onda, mayor es la energía que ésta transmite. Precaución.

Es una dependencia que la infografía del espectro muestra de forma clara. Y así, en ella, podemos ver cómo los valores más altos de frecuencia se corresponden con las zonas que conocemos como de radiaciones gama, rayos X y ultravioleta (UV).

Todas ellas de alto contenido energético, capaces de producir daños en las personas. Desde las más o menos superficiales quemaduras en la piel hasta, a niveles más profundos, las que llegan a afectar a nuestro ADN.

Abreviatura de ácido desoxirribonucleico, cuyo papel principal es el del almacenamiento a largo plazo de información. El material genético, por tanto, que rige los procesos de nuestras vidas.

Una muy dañina afección les decía que, al alterar dicho material, puede dar lugar a adenocarcinomas, es decir, tumores. Un asunto delicado. Caución.

Pero hasta aquí, hasta la zona del UV, es donde llega el peligro de la radiación electromagnética.

El resto de zonas del espectro con frecuencias más bajas -visible, infrarrojo IR, microondas y radioondas-, son inofensivas; no provocan daños materiales en los seres vivos.

Y la tecnología wifi se encuentra dentro de este rango de ondas inofensivas para la salud. Han de saber que su banda del espectro está cercana a las ondas microondas, más en concreto, por encima de las de radio pero por debajo de la luz visible.

O lo que es lo mismo.

La radiación wifi es más energética que la de radioondas, pero menos que la misma luz visible, sea ésta natural o artificial ¿Y acaso no vivimos y vemos a gracias a éstas? ¿No nos comunicamos merced a la otra? Entonces, ¿de qué milonga nos están hablando?

O como diría la manchega: “Pero, ¡qué invento es esto!”, la Montiel dixit. En fin.

Abandonamos por ahora el punto de vista de la ciencia teórica, y su confirmación de que la wifi no es perjudicial, y continuemos con la argumentación. Ahora desde el campo de la lógica.

La wifi no es perjudicial, y lo dice la lógica
Así es. La más elemental lógica nos lleva a pensar que si, por un lado, una red wifi transmite menos energía la que la misma luz visible que nos alumbra.

Y por otro es evidente que vivimos desde hace algún que otro millón de años, gracias a la natural proveniente del Sol, y llevamos unos ciento treinta años alumbrándonos con la artificial que nos proporcionan las bombillas, de las que estamos rodeados desde entonces y no parece que hayamos enfermado por ello.

Entonces, ¿qué peligro hay en que nos rodeen las redes wifi, que son menos energéticas? O sea.

Es más, por estotro. Si realmente fuera una tecnología peligrosa, ¿se usaría en hospitales, escuelas, organismos oficiales, etcétera? O sea que. (Continuará)



1 comentario :

Anónimo dijo...

No se puede demostrar que no sea perjudicial indicando una sola razón... puede haber otra/s para que lo sea.

Por ejemplo la WiFi está en una banda de frecuencias cuyo uso es gratuito porque hay una serie de moléculas de la atmósfera y también presentes en los seres vivos que absorben su energía. Por ello no tienen mucha utilidad en transmisión a largas distancias y se desconoce los efectos secundarios de esta absorción puesto que la mayoría de los estudios están sesgados o son insuficientes.