viernes, 15 de junio de 2012

Un adolescente resuelve un problema propuesto por Newton (II)

(Continuación) Bien ¿Pero cómo entraron en contacto el problema newtoniano del siglo XVII y el niño superdotado del siglo XXI?

¿Cómo sucedieron los hechos?
Todo empezó durante una visita que el curso de Shouryya realizó a la Universidad de Dresde, y donde los profesores de dicha institución les mostraron el problema de Newton y les explicaron, aquí el principio de todo, que nadie había encontrado una solución teórica.

Después les dijeron cómo se resolvía, de forma bastante aceptable mediante ordenadores, por un método de aproximación, e incluso les ofrecieron datos experimentales con los que analizar la trayectoria del lanzamiento de una pelota y posterior rebote.

Pero nada de solución teórica, todo empírica. Es lo que había y, en realidad, no se necesitaba más. Además estaba el detalle de que nadie en más de 350 años lo había conseguido.

Y fue esta aparente imposibilidad la que en realidad impactó a nuestro joven. Como él mismo cuenta: “Yo sólo me preguntaba, ¿por qué no?”.


Una pregunta que encierra, a partes iguales, ingenuidad y curiosidad. Dos características humanas.

Y dicho y hecho. Se puso manos a la obra sin que, por lo que se sabe, le costara mucho encontrar una ecuación, no muy compleja por cierto, que permitía calcular la trayectoria de vuelo de una bola y predecir cómo va a golpear y rebotar en una pared.

Una simple ecuación que resuelve con exactitud, no solo el problema planteado y no resuelto por Sir Isaac Newton, calcular la trayectoria de un proyectil sujeto a la gravedad y la resistencia del aire.

Sino también el de identificar el tipo de impacto y rebote que se produce cuando un cuerpo choca contra una pared. Así que dos por uno. Bien por Shouryya.

“Solución analítica de dos problemas fundamentales…
“Solución analítica de dos problemas fundamentales no resueltos de la dinámica de partículas”. Éste es el título completo del trabajo ya publicado, y que vienen a ser como dos teorías de Dinámica de partículas, con dos ecuaciones para lo que no es más que un problema de Dinámica Clásica.

Un desarrollo teórico que puede sustituir a los cálculos que, hasta ahora, realizan potentes ordenadores que emplean un método empírico de aproximaciones.

Una primera ecuación cuya solución permite calcular posición y velocidad de un proyectil con una aceleración concreta, atraído por la gravedad y frenado por la fricción del aire.

Y otra que determina el comportamiento de un proyectil que choca contra una pared. Las dos relativamente sencillas y publicadas en el mismo trabajo. (Continuará)


1 comentario :

Anónimo dijo...

Ya era hora